Los tiempos son ásperos. La crisis golpea. Los bolsillos flaquean. Y el comercio agoniza. Los locales que ponen el cartelito «Liquidación por cierre» se multiplican. La ciudad siente el efecto indolente de la escasez de circulante, de las fuentes de trabajo que se cierran, del agotamiento.

 

 

De la Redacción de Entre Ríos Ahora.