Por Francisco Nessmann (*)
Allá por 1993 se sanciona la Ley Nº 8.732 de Jubilaciones en Entre Rios.
Una de sus características es que definía que la Caja de Jubilaciones funcionaba como un Ente Autárquico, es decir que los presupuestos que administraría eran de los trabajadores, e intangibles para la administración de Gobierno.
Pero en 1995, con la Ley Nº 8.918 de Emergencia del exgobernador Mario Moine (hoy casualmente de regreso en el Gobierno de Frigerio), le quitó esa autarquía y los aportes de los trabajadores pasaron a la “clandestinidad” de los distintos Gobiernos que nunca derogaron el artículo de la pérdida de autarquía.
En síntesis, la ley define que el presupuesto de la Caja de Jubilaciones es de los trabajadores producto de sus aportes.
En este transcurrir, los distintos gobiernos tomaron medidas arbitrarias, generalmente en contra de los trabajadores y el funcionamiento del sistema.
Hasta que, hoy, vienen un Frigerio y un Gastón Bagnat –presidente de la Caja de Jubilaciones y Pensiones- a instalar un supuesto «déficit», definido desde mirar desde el “agujero de su cerradura”, es decir de su mirada de modelo AFJP y Anses.
Dicho en otros términos, es ideario de este Gobierno como premisa el “ajuste” y que un jubilado es un “gasto a eliminar”.
Pero, en sus propias declaraciones, Bagnat expone su propia contradicción:
-Reconoce que 14 escalafones sostienen otros 84. Para clarificar esto, dice que hay 84 escalafones (organismos) a los cuales abona a sus jubilados, pero los trabajadores activos se fueron a otras Cajas (municipales, bancarios, energía, etc.).
-Dice que algunos organismos dejaron en la Caja Provincial sus jubilados y se llevaron los activos a aportar a Anses o Cajas Municipales.
Es más, hasta se atreve a decir que es probable que en un futuro se empaten aportantes y jubilados.
¿Saben qué quiso decir?
Expresa la síntesis de este Gobierno que quiere achicar y/o disolver el Estado entrerriano, cerrar organismos, cerrar fuentes de trabajo y eliminar aportantes Es totalmente calculable la disolución del Estado y el empleo provincial que provocará claramente la quiebra del sistema.
En otras palabras, en esta relación activos/jubilados declara abiertamente que cerrará todo lo público como ajuste (escuelas, salud, caminos, viviendas, cloacas, etc), todo aquello que considera “gasto público” y, lógicamente, eliminar el “gasto que es un jubilado”.
Sin embargo, muchas veces es más grave lo que no se dice para justificar lo que intenta:
-Jamás salió a “reclamar” al Gobernador que si pagaba salarios “en negro” estaba desfinanciando la Caja de Jubilaciones para defender lo que administra.
-Jamás salió a reconocer que aumentó los aportes de los activos porque el Estado provincial se excusaba de ser el garante del sistema previsional.
-Jamás salió a reconocer que muchos trabajadores exceden largamente sus años de aportes al momento de jubilarse, sin beneficio alguno.
-Jamás reconoció que, extendiendo los montos y los años de aportes, ilegalmente estaba eliminando los “regímenes especiales”, leyendo el artículo que lo beneficiaba y olvidando los que sostenían a los trabajadores.
-Pero lo peor de todo ocurre cuando el Gobierno simula que Nación le transfiere a la Provincia 48 mil millones de pesos para el sistema previsional y lo proclaman como un logro.
Dos cosas son graves en esto: no es una “transferencia” de favor político; es un pago de deuda existente.
Y más grave aún que esa deuda es a la fecha de “154 mil millones de pesos”.
Es decir que, en este relato, ceden a Nación las dos terceras partes de la deuda de convenio que Nación tiene con la Caja de Jubilaciones de Entre Ríos.
En números, de $154 mil millones, hace convenio con Nación por $48 mil millones y se retira de la demanda en la Corte Suprema… es decir por el resto e intereses.
Todo por alianza y complicidad con el Gobierno Nacional.
Reiteramos, venden como que Nación «transfiere» cuando en realidad está «pagando lo que debe».
Y aquí viene la gran pregunta:
¿Quién autorizó al Gobierno de Frigerio y Bagnat a “negociar” y «resignar» Presupuesto que es de los aportes previsionales de los trabajadores?
Jamás se consultó a los verdaderos dueños de esos fondos al respecto, pero también acá queda al desnudo otra falacia: no hay déficit, había y sigue habiendo una enorme deuda de Nación entre otros datos
Pero siempre prefieren que la paguen los trabajadores.
Por ello, creemos imprescindible la convocatoria a plenario de secretarios de Jubilados y a la Multisectorial de Trabajadores de Entre Ríos para interpelar al presidente de la Caja y legisladores, porque no puede seguir dándose la falacia y la impunidad mediática para desmantelar el sistema previsional de los trabajadores de Entre Ríos.
(*) Francisco Nessmann es secretario gremial de la seccional Federal de la Asociación Gremial del Magisterio de Entre Río (Agmer).

