Encarcelado desde el 21 de abril, el cura Juan Diego Escobar Gaviria está evaluando darse una nueva estrategia legal. O al menos, y más simplemente, cambiar de abogado para que lo represente en la delicadísima causa penal que lo tiene como único imputado y en la que se lo acusa de cuatro casos de abuso sexual en perjuicio de menores en Lucas González.
El sacerdote, de momento, ha tenido el asesoramiento legal de Milton Ramón Urrutia –a la vez querellante en otra causa por abuso que involucra a un sacerdote, Justo José Ilarraz–, Juan Pablo Temón y María Alejandra Pérez. Pero en las últimas horas sondeó al abogado nogoyaense Domingo “Mingo” Negri. Una secretaria del letrado acudió este miércoles a los Tribunales de Nogoyá para interiorizarse del caso, y avisó que Escobar Gaviria había citado a Negri para charlar en la cárcel de Victoria.
La causa contra Escobar Gaviria se abrió a finales de octubre último, cuando dos religiosas de la congregación Hermanas Terciarias Misioneras Franciscanas, que dirigen el Colegio Castro Barros San José, de Lucas González, en el departamento Nogoyá, denunciaron ante el defensor oficial Oscar Rossi un primer caso: un nene de 11 años que dijo haber sido abusado por el cura mientras era monaguillo. Después, se sumaron tres denuncias más, y el cura vio su situación procesal muy delicada.
El 21 de abril fue enviado a la cárcel de Victoria, y desde entonces no ha visto la luz del sol. El viernes 26 de mayo, el Juez de Garantías de Gualeguay, Esteban Santiago Elal, actuando como subrogante del Tribunal de Juicios y Apelaciones, extendió la prisión preventiva hasta después de que se dicte sentencia en el juicio que está previsto que se inicie el 22 de agosto. La causa fue elevada a juicio el 9 de mayo, luego de que los fiscales Federico Uriburu y Rodrigo Molina dieran por concluida la investigación penal preparatoria.
Entonces, la causa salió de los Tribunales de Nogoyá y ahora está en Gualeguay. Un último recurso de los defensores de Escobar Gaviria fue casar la resolución del juez Elal que dispuso mantener al cura en prisión preventiva hasta que se conozca el fallo. El incidente deberá ser resuelto ahora por la Cámara de Casación Penal de Paraná.
Mientras, Escobar Gaviria tantea el terreno para conseguir nuevo abogado.
Las charlas avanzan con Negri, un personaje muy conocido en Nogoyà.
El libro “Código de Fuego”, del periodista Daniel Enz, lo menciona a Negri como alguien ligado al “hampa”. Y agrega: “En 1991 terminó en la cárcel de Las Flores de Santa Fe, junto a otro colega, Pedro Albrecht, con quien se conocía de tiempos en que ambos cursaban la carrera de Derecho en la Universidad Nacional del Litoral (UNL). Allí terminaron los dos al verse involucrados en la causa por el crimen del empresario Elio Moreyra, dueño del círculo de ahorros de automóviles País SRL. Fue en agosto de 1991 cuando le allanaron a Negri uno de sus campos en proximidades a Nogoyá. Moreyra fue secuestrado en febrero de 1988 y se exigió un rescate de quinientos mil dólares que fue puntualmente cobrado por una joven que pudo huir al plan policial y nunca más pudo ser hallada. Entre los policías que investigaron el caso siempre coincidieron en el parecido que tenía esa mujer con Norma Rossi, siempre ligada a Negri y Albrecht . Pero luego Moreyra resultó asesinado. Un albañil, de apellido Avellaneda (según figura en la causa de ocho cuerpos) involucró a Negri como supuesto partícipe del secuestro. El abogado recién se presentó a la Justicia el 1 de octubre de 1991 y el magistrado Julio César Costa dispuso su detención. Fue absuelto en 1993, luego de padecer dos años de cárcel. El juez del Crimen Alfredo Rosas consideró cuestionables los dichos del albañil, quien lo acusó (declaró más de diez veces y siempre cambió su testimonio), y le creyó a Negri, que siempre sostuvo su inocencia. En la causa (con varias irregularidades, como por ejemplo, el hurto de los pelos de la víctima, hallados en el auto donde apareció muerto) únicamente fue condenado el albañil”.
De la Redacción de Entre Ríos Ahora.