La extensísima sesión de la Cámara de Diputados que se desarrolló este miércoles, y que duró largas tres horas, derivó en el rechazo del pedido de la apertura de un proceso de juicio político a la presidenta del Superior Tribunal de Justicia (STJ), Claudia Mónica Mizawak.
El Frente para la Victoria (FPV), encolumnó a todos sus legisladores tras el dictamen que votó la mayoría de la Comisión de Juicio Político de la Cámara Baja, que preside el exintendente de María Grande, Diego Lara.
La votación resultó 21 legisladores en contra de la acusación, y 12 por la afirmativa.
Al voto del FPV, se sumó el radical Ricardo Troncoso, y también acompañaron, desde el Frente Renovador, Daniel Koch y Gustavo Zavallo.
También votó el presidente de la Cámara, el exgobernador Sergio Urribarri, rozado directamente en la denuncia contra Mizawak: uno de los cinco puntos pidió averiguar si la jueza era o es social comercial del extitular del Ejecutivo.
«Personalmente, soy el principal interesado en aclarar este tema», dijo Urribarri, al interrumpir la exposición larguísima del diputado Lara en el rcinto.
Dijo además que las denuncias contra Mizawak eran «falsas», «maliciosas» y «falaces». Y que perseguían «un solo objetivo» el cual sería «mancillar su personal y su gestión».
La investigación sobre Mizawak, asveró Urribarri, se abrió «sólo por un párrafo de un medio de prensa».
Pero ya las cartas estaban echadas, y Mizawak, se sabía, quedaría a salvo.
De la Redacción de Entre Ríos Ahora.