Las calles de la ciudad en ocasiones se convierten en efluentes adh hoc de los arroyos. A veces las pérdidas de las cañerías, a veces la rotura del pavimento que daña los ductos, a veces el vuelco indolente de los vecinos. Un día cualquiera, calle Bravard, en la bajada que lleva al arroyo Las Viejas y al balneario Thompson presenta una imagen así: un río sobre el asfalto. Y no por rotura de caño, sino por vuelco domiciliario.
De la Redacción de Entre Ríos Ahora.