Este jueves, a las 12, se realizará una audiencia en Tribunales para analizar la prueba colectada en el marco de la causa que investiga al expresidentes de Sistema de Crédito Entre Ríos (Sidecreer), Juan José Canosa, por la eventual comisión de dos delitos: enriquecimiento y negociaciones incompatibles con la función pública.
En el segundo caso, según fuentes judiciales, Canosa –que dirigió los destinos de Sidecreer durante las dos administración de Sergio Urribarri, entre 2009 y 2015—se encuentra más seriamente comprometido. Licitaciones y contratos con empresas ligadas a su entorno familiar, y un allanamiento en la casa de su suegra, la madre de la defensora oficial, Paula Montefiori, lo han puesto contra las cuerdas.
En la audiencia, estarán presentes su abogado defensor, Raúl Barrandeguy, el fiscal que lleva adelante la investigación, Juan Malvasio, y la jueza de Garantías, Susana María Paola Firpo. Se espera que en su transcurso, la defensa de Canosa ponga en tela de juicio la prueba colectada por la Justicia a partir de una serie de allanamientos que tuvieron lugar la última semana en Paraná y en Santa Fe.
La jueza Paola Firpo ordenó una serie de allanamientos en Paraná y Santa Fe, en el marco de una causa en la que se investiga si el ex presidente de Sidecreer Juan José Canosa, realizó contrataciones irregulares que beneficiaron a familiares. Los operativos estuvieron a cargo de la Policía de Entre Ríos y delegados judiciales.
La Justicia efectuó allanamientos el lunes 30 de enero. Fueron 4.
En Santa Fe, un allanamiento tuvo lugar en la sede de Excelcom SA, una empresa a la que Sidecreer le pagó 635.000 dólares por la provisión de insumos informáticos, entre 2008 y 2015. Si bien Juan José Canosa no aparece en el directorio, los accionistas son personas allegadas: María José Cuestas y Diego Aníbal Urba figuran como presidente y vicepresidente, respectivamente; y a partir de 2014 se incorporó Alicia Cuestas como directora titular, es decir, la pareja de Carlos Alberto Canosa, su hermano.
Alicia y María José Cuestas son hermanas entre sí e hijas de Mirta Graciela Gueler y Néstor Cuestas, uno de los integrantes del reconocido dúo folclórico Los Hermanos Cuestas. Precisamente, en los procedimientos también se secuestró documentación relacionada con Gueler. De acuerdo con la información recolectada por los investigadores, la suegra de Carlos Canosa le habría vendido a Sidecreer uniformes e indumentaria por 262.300 dólares, entre 2012 y 2015. El portal Noticia Uno detalló que se trata de uniformes para el personal de la empresa estatal, como también remeras, shorts de fútbol, cofias y delantales que eran donados a clubes e instituciones en el marco del programa de Responsabilidad Social Empresaria encarado por la tarjeta.
También, la policía allanó la vivienda particular del hermano de Canosa, en calle Gobernador López Jordán 2775, en el barrio privado Santa Cándida, detalló Página Judicial.
La sospecha, en ambos casos, es que Juan José Canosa contrató a su hermano a través de la suegra de éste, Mirta Gueler; a su cuñada Alicia Cuestas y a su concuñada María José Cuestas, a través de Excelcom SA; y a su amigo Diego Urba, también por vía de Excelcom SA. Esto constituye la base de la imputación por negociaciones incompatibles con la función pública contra el ex funcionario y actual asesor de la Cámara de Diputados.
Además, fueron allanadas oficinas de la empresa Diveria SRL, en calle San Martín 3427, primer piso, en pleno centro de la ciudad de Santa Fe. Esta firma fue contratada en 2013 por Canosa para realizar «tareas de diseño, desarrollo e implementación de una nueva solución informática que dé soporte a los procesos de negocios de Sidecreer» por 2.946.000 pesos más IVA. Las caras visibles de Diveria SRL son Marcelo Luis Fassi y Andrés Víctor Hoyos.
El sistema informático aún no funciona y eso motivó que el Tribunal de Cuentas hiciera observaciones respecto de que «las falencias del sistema actúan en detrimento de la fiabilidad e integridad de la información de la empresa».
De la Redacción de Entre Ríos Ahora.