Los usuarios del servicio de colectivos en Paraná están mal acostumbrados a un servicio pésimo. La tarifa aumenta -pasó de $97,50 a $117,20- y las condiciones del servicio siguen igual: pésimas frecuencias, coches destruidos, falta de higiene, garitas inexistentes en buena parte de los recorridos. Se acepta viajar así, porque de lo que se trata es de viajar, dicen los usuarios, entre la bronca y la resignación.

 

 

 

De la Redacción de Entre Ríos Ahora