El antiguo kiosco de revistas de Celia, ubicado en Yrigoyen y Gualeguaychú, hace rato que no es tal: ya no está Celia, ni los diarios ni las revistas. Tampoco los enseres que comercializaba, sobre todo en los 80, cuando viajar a Uruguayana, en Brasil, y traer café, castañas de cajú, remeras Hering y chucherías varias era lo mismo que para cierto sector acudir por el «déme dos» a Miami. Celia vendía en su kiosco y recorría reparticiones públicas, y conseguía clientes fieles. Ahora, el kiosco está abandonado, y en obras. Dos albañiles trabajan. Pero aquel kiosco ya perdió la magia. Podrán reconvertirlo, remozarlo o hacerlo escombros. El espíritu del viejo kiosco de Celia hace rato se apagó.

 

 

De la Redacción de Entre Ríos Ahora