Las veredas de la ciudad van de mal en peor. No siempre, claro, la responsabilidad es del Estado. Los frentistas poco atienden el estado general de las veredas. Les faltan mosaicos, tienen huecos, son un estorbo para el peatón. Así pasa con los privados y con el Estado. Una de las veredas rotas es la del Museo de Bellas Artes Pedro E. Martínez. Aunque ahora el asunto está en plan de solución. Y al parecer no se trata sólo de poner los mosaicos que faltan. La tarea es a fondo, y de reemplazo completo.
De la Redacción de Entre Ríos Ahora.