El tiempo no ha sido aliado para el estado de la prestación del servicio de transporte de pasajeros en Paraná. Los colectivos tienen un abandono importante, casi no se limpian y la mayoría tiene su carrocería destrozada. A eso, se suma los serios déficits del servicio: frecuencias que no se cumplen, y días que se vuelven una lotería para conseguir un coche, como en fines de semana. No hay renovación de unidades -no se cumple el contrato- y el Estado hace la vista gorda.

 

De la Redacción de Entre Ríos Ahora