Conocida la condena a 10 años de prisión por el delito de trata con fines de explotación sexual que dictó este jueves el Tribunal Oral Federal, dos de las figuras políticas más relevantes que fueron rozadas por el testimonio de la monja Martha Pelloni en el juicio que se desarrolló en los Tribunales Federales de Paraná, Mauro Urribarri, hoy ministro de Gobierno, y Enrique Cresto, actual intendente de Concordia, salieron a hablar del caso.
El jueves 23 de febrero, Pelloni se presentó como testigo en el juicio y dijo: “Lo que manifesté en los medios fue que (María Crista Escobar, la madre de la menor víctima de trata) nombró a Alfonzo como el que le ofreció trabajo a su hija vendiendo entradas anticipadas para un boliche, porque era como que este señor trabajaba haciendo propaganda con chicas a las que les daba distintos oficios y ofrecimientos, pero lo que había de fondo era el tema de la prostitución. La señora nombró también a (Enrique) Cresto, que en ese momento era senador; al hijo del gobernador en ese momento, (Mauro Urribarri). Y también mencionó al del Copnaf, que era (Fernando) Rouger, donde este señor era el jefe. Esos son los nombres clave”, detalló.
Al respecto, Urribarri hizo pública una declaración en su muro de Facebook y sostuvo: “Hoy la Justicia se ha expresado sobre un hecho terrible como es la trata y explotación de una menor. He esperado este momento sin pronunciar comentarios o declaraciones que puedan llegar a dar lugar a polémicas de carácter mediático. Entiendo que hay que ser respetuosos de los tiempos del accionar del Poder Judicial.
“Cuando tiempo atrás este hecho se hizo público a través de los medios de comunicación, se echaron a andar versiones completamente falsas sobre una supuesta participación mía.


“Lo cierto es que todas esas especulaciones y esa animosidad me generaron un enorme perjuicio en términos personales. Es inevitable sentir indignación y angustia cuando uno tiene hijos y una familia que son siempre los que más sufren ante ese tipo de ataques. Gracias a ellos, a los amigos y al acompañamiento y apoyo de mucha gente que me conoce, es que uno puede sobreponerse y seguir trabajando todos los días, con la certeza de que el tiempo siempre pone las cosas en su lugar; y que una mentira por más que se repita mil veces, sigue siendo una mentira.
“Ojalá en el futuro estas prácticas nefastas no tengan más cabida. Porque le hacen muy mal a la comunidad, a la política y al rol fundamental que cumplen los medios de comunicación en democracia”.
En tanto, Cresto sostuvo: “Fue una fábula que se realizó en una época electoral”. Y agregó: “Gracias a Dios, yo vengo de una familia política; mi mujer, mis hijos saben lo que es esta actividad, así que desde siempre supimos que fue un caso que se usó políticamente para dañarnos, pero a pesar de esas maniobras hoy tengo la satisfacción de haber podido acceder a la intendencia con más del 50% de los votos”.
Tras conocerse el resultado del juicio, en declaraciones al sitio 7 Páginas, Cresto entendió que “lo demás corre por cuenta de la gente que fabula, pero a mí lo que más me preocupaba era que se decían esas cosas en un tiempo electoral, así que ahora pueden decir lo que quieran porque ya estamos frente al municipio con un montón de proyectos-aclarando- que en un momento me preocupaba porque en tiempos electorales el hecho de que uno pierda un voto porque siempre hay algunos que pueda llegar a creer de esa fábula, pero ahora que ya estamos en la intendencia yo disfruto de lo que estoy haciendo”, señaló.

Antes de ser condenado, Alfonzo hizo uso del derecho de hablar, y mencionó a Enrique Cresto, actual intendente de Concordia (PJ), quien en la causa apareció nombrado por María Cristina Escobar, la madre de la víctima, en un congreso binacional de lucha contra la trata de personas y la violencia de género que organizó la monja Martha Pelloni, en abril de 2015. En ese mismo cónclave también surgió el nombre de Mauro Urribarri, hoy ministro de Gobierno y el de Fernando Rouger, ex delegado del Consejo Provincial del Niño, el Adolescente y la Familia (Copnaf), de Concordia.
Dijo Alfonzo: “Le pido a este tribunal lo siguiente: el fiscal dijo vamos a pedir una ampliación para mandar a (Concepción del) Uruguay y agregar a la causa todo lo que ha pasado y lo que se ha dicho ¿Por qué tiene que terminar la causa y a mí me tiene que dar una pena y a Enrique Cresto, que le hizo el amor y le pegó, no lo llamaron? No tuvieron tiempo, no pudieron. Las declaraciones gravísimas que ha dicho S. en la Cámara (Gesell) y a mí me están por juzgar por cosas pendientes que podrían demostrar muchas cosas: la mentira, la barbaridad esta. No entiendo, no comprendo. Pero uno debe aprender y de los errores se aprende. Nunca más voy a ayudar a nadie como andaba S. nunca más le voy a dar techo, ni de comer a nadie”.

 

De la Redacción de Entre Ríos Ahora.