La Semana Santa está a nada. Los católicos transitan la Cuaresma, con sus rituales. Pero al margen de la celebración religiosa que ocurre estos días, la ocasión abre muchas posibilidades: es un feriado extralargo y en esta época se consumen productos que, por la alta demanda, aumentan el precio. Aunque hay precios insólitos, como un diminuto huevo de Pascua -el envoltorio lo disfraza- que se vende en un supermercado de Paraná a casi $9.000.
De la Redacción de Entre Ríos Ahora