El Superior Tribunal de Justicia (STJ) rechazó todos y cada uno de los amparos presentados por trabajadores y extrabajadores de la Cámara de Diputados que se vieron afectados por las medidas adoptadas por la actual administración, que encabeza el titular del cuerpo, Gustavo Hein, luego de un proceso de revisión de nombramientos, recategorizaciones y pases a planta ocurridos durante el último año de la gestión anterior.

El caso paradigmático fue el de los dos hijos del exintendente de Paraná, Adán Bahl: Joaquín y Franco Bahl, cuyas designaciones fueron cuestionadas. Joaquín Bahl acudió a la Justicia, pero un fallo de primera instancia de la jueza de feria Cecilia Bértora rechazó el recurso de amparo presentado con el argumento de que esa no era la vía para reclamar. Disconforme, uno de los dos hijos del exintendente acudió al STJ, donde tampoco tuvo suerte.

Revocan nombramiento del hijo de Bahl en Diputados

 

La jueza Bértora también rechazó los otros siete amparos presentados por trabajadores de la Cámara de Diputados afectados por medidas de revisión que impuso Hein. Todos los planteos fueron rechazados en primera instancia. En el STJ primero ocurrió la sentencia adversa al hijo de Bahl; luego, el máximo tribunal se pronunció sobre tres casos, también rechazados; este lunes 18 el Superior Tribunal también denegó las apelaciones sobre los amparos presentados por otras cuatro personas contratadas en Diputados: Diego Gerardo Lascurain; Darío Maximiliano Acevedo; Juan Manuel Vidal y Lía Jimena Solís.

Al apelar el fallo adverso de Bértora, los cuatro afectados señalaron que «por razones de excesivo rigor formal injustificado y exteriorizando una manifiesta negación de justicia que torna en arbitrario por incongruente el fallo apelado, con manifiesta violación del derecho de defensa y debido proceso legal, rechazó la demanda por `inadmisible`, sin entrar al fondo de
la cuestión y sin considerar ni resolver las cuestiones expuestas sobre la violación de los derechos laborales en juego, que lesionó el acto revocatorio cuestionado».

Tildaron el fallo de «cruel y diabólico». Más todavía, plantearon la notoria «y grave la falta de empatía de la jueza con la situación de los recurrentes, quienes esperaban una resolución no sólo favorable a su pretensión, sino que la jueza se hubiera interesado en el fondo del caso que los afecta laboralmente y que hubiera hecho un tratamiento sistemático y estudiado de las consideraciones argumentales expuestas».

Al contestar la demanda, la Cámara de Diputados dijo que la gestión anterior «claramente incurrió en una conducta arbitraria y, en el caso de los amparistas, no solo fueron designados mientras desempeñaban cargos políticos o electivos, sino que además lo fueron en desmedro del personal de planta transitoria que debió ser priorizado a la hora de decidir los nombramientos».

En su voto, el juez Daniel Omar Carubia tomó palabras de la presentación de la Cámara de Diputados y dijo que «nos encontramos frente a designaciones evidentemente atípicas y ciertamente anómalas, fuera de toda lógica y sensatez, toda vez que los nombramientos `en planta` de los aquí reclamantes se produjeron sin configurar la conclusión de una actuación administrativa que contenga toda la información necesaria para otorgar fundamento controlable al acto administrativo de designación, la cual se dispuso insólitamente con efectos
retroactivos, lo que genera un mayor manto de dudas y suspicacias en derredor de ello, máxime cuando, de tomarse la fecha del acto administrativo revocado, éste no llegaría al año desde su génesis -requisito temporal esencial para lograr la estabilidad laboral- antes de que ocurriera la finalización del mandato de la gestión signataria, motivo por el cual, como atinadamente lo pone de relieve el señor Procurador en su dictamen, el agente no alcanzaría el año calendario de desempeño en las funciones propias a la categoría o jerarquía asignada, incumpliéndose así con uno de los recaudos sine qua non para lograr la estabilidad laboral; desempeño que no se concretó tampoco en los hechos».

El vocal Germán Carlomagno coincidió con la «improcedencia» del planteo, a lo que se sumó la vocal Claudia Mizawak con el rechazo a la apelación. En igual sentido se pronunciaron Mariana Soage y Susana Medina.


De la Redacción de Entre Ríos Ahora