En septiembre de 2023 empezó la obra de remodelación de la Escuela Integral N° 4, de Rosario del Tala, y la expectativa de la comunidad educativa fue cumplir los 55 años de la institución en un lugar, aunque en obras, remozado.

La escuela, creada en 1969, celebra este jueves 13 los 55 años, pero el nuevo aniversario lo festejarán «en la calle», con un abrazo simbólico al edificio destruido. El 3 de diciembre último la empresa encargada de la obra levantó el obrador y desde entonces no se tienen noticias.

En el incio del ciclo lectivo 2024 los directivos de la Escuela Integral N° 4 ocuparon todo un mes en encontrar un lugar adonde llevar a su población escolar. El ciclo recién se abrió el 26 de marzo y de modo muy precario. La Asociación Talense de Ayuda al Discapacitado (ATADIS) cedió sus instalaciones para que funcionara la escuela.

Fabricio Pons, que concursó y este año asumió la dirección de la Escuela Integral N° 4, cuenta que para poder funcionar en otro lugar alternativo tuvieron que adoptar el funcionamiento de la institución.

«El 3 de diciembre, la empresa que estaba a cargo de la reconstrucción del edificio de la escuela se retira argumentando falta de pago. En el inicio del ciclo 2024, nos enconramos con que habían roto casi toda la escuela, teníamos el corte de servicios, y a todo el personal cumpliendo horarios en una institución de al lado que nos brindó el espacio», relató.

Así, en febrero, cuando se dio la vuelta del personal directivo para el comienzo del calendario escolar 2024, «comenzamos a buscar un lugar acorde a las particularidades de nuestros alumnos. Estuvimos mucho tiempo buscando lugar. Rosario del Tala es pueblo chico, no hay muchos lugares acordes a nuestra población. Se decidió con las autoridades dar inicio el 26 de marzo el ciclo, en ATADIS.  Pero pasaron de contar con 14 espacios para funcionar a tener solamente 4. Por eso motivo, trabajamos en sistema de burbujas», detalló el docente.

No hubo forma de hallar otro sitio donde mudar a la Escuela Integral N° 4. Allí concurren alumnos con todo tipo de discapacidad. «No entramos todos en el mismo lugar. Entonces, funcionamos por sistema de burbujas. Son dos burbujas: un grupo va lunes, miércoles y viernes, y oro  grupo, martes y jueves. A la semana siguiente, los grupos van rotando. El comedor funciona todos los días pero por una cuestion de espacio comen los chicos que van. Algunos chicos, comen en el aula. Si entran 7 chicos en sillas de rueda al comedor, ya no queda espacio para otros. Entonces, el resto com en el aula», añade.

Ahora, aguardan que las autoridades puedan acordar con la empresa constructora el reinicio de las obras. Desde el Consejo General de Educación (CGE) les habían prometido que en mayo comenzarían los trabajos. No ocurrió así. El maestro Fabricio Pons vislumbra que 2025 será  igualmente complicado porque las obras no podrán concluirse a tiempo para abrir el ciclo lectivo en el edificio remodelado si es que se retoman los trabajos.

 

 

 

 

De la Redacción de Entre Ríos Ahora