El viernes 20 se publicó en el Boletín Oficial de la Provincial el texto, escueto, de la ordenanza N° 9.392, votada el 21 de abril último, a través de la cual el Concejo Deliberante de Paraná derogó lo que había dispuesto en 2012 mediante ordenanza N° 9012, cuando dispuso la “donación” a la Provincia del predio donde funcionó la Escuela Granja para afectarlo a la construcción del Estadio Único de Paraná.
Todo ese predio, el de la exEscuela Granja, vuelve ahora a propiedad municipal, otra vez.
Va de suyo, la ciudad no tendrá Estadio Único.
Todo aquello que se dijo, que se anunció, en nada.
2012, en el Teatro, entonces todo era posible.
La noche del 21 de junio de 2012, en el Teatro 3 de Febrero, y ante un público que colmó la sala con el fervor de hinchas de fútbol, el exgobernador Sergio Urribarri pronunció aquella frase que quedaría para los pliegues menores de la historia:
“Me gustaría tener 30 años menos y ocho o 10 kilos menos para poder correr en la cancha del nuevo estadio”.
Pudo haber vuelto atrás el reloj biológico y someterse a una cien dietas pero lo que no podrá es correr en la cancha del nuevo estadio. La ciudad no tendrá nuevo estadio. Otro sueño que se hizo añicos contra la pared de la realidad.
Urribarri dijo entonces que ese era “un día muy especial” que “trascenderá en la historia” y sostuvo que el estadio “será orgullo de todos los paranaenses y de todos los entrerrianos”.
Urribarri contó entonces que el estadio único “no es un proyecto improvisado, sino que es el fruto de meses de trabajo y esfuerzo”.
Blanca pensó que podía ser, pero no: no hubo Estadio Único.
Ese Estadio Único se levantaría en la zona del Brete, donde antes estuvo la Escuela Granja Municipal, y que todo tendría la envergadura de circo romano: capacidad para 35.000 personas, un costo de 1.000 millones de pesos.
El predio, según el proyecto oficial, ocuparía una superficie de 60 hectáreas y contaría con un estadio multieventos cerrado para actividades vinculadas al básquet, al hándball y al tenis, y para encuentros artísticos, y para empezar con todo eso, en el Boletín Oficial del 23 de octubre de 2012, se publicó el Decreto Nº 2909 de fecha del 29 de agosto, del Ministerio de Planeamiento, Infraestructura y Servicios, que informó de una modificación presupuestaria con el objetivo de “atender los gastos de estudios y proyectos para la construcción de la obra Centro multieventos y nuevo estadio en la ciudad de Paraná”.
Y para eso transfirieron cinco millones de pesos, que iban a ser destinados a la atención de esos gastos.
El Poder Ejecutivo previó invertir en esa obra un total de 1.057.936.000 pesos, en tres etapas: en el ejercicio actual se ejecutarán hasta 407.008.000 pesos, en el ejercicio 2014 un desembolso de 467.173.000 pesos y el resto en 2015, unos 183.755.000 pesos.
Cuatro años después de tanto fervor y anuncios, todo quedó en nada: el predio que donó la Municipalidad para construir el Estadio Único se recuperó, y volvió de nuevo a propiedad de la ciudad, y del Estadio Único casi nadie se acuerda: en su lugar, ahora hay un paseo botánico, con banquitos, senderos, bicisenda y juegos infantiles.
Nada más.
De la Redacción de Entre Ríos Ahora.