Sucede a diario.
Entre lo feo, lo malo, lo sucio, aparece la belleza en la ciudad.
A veces pequeños gestos, mínimos hechos, situaciones casi imperceptibles.
Pero valiosos.
Es el caso de ese cartel puesto en la vereda de calle Liniers, próximo a la dársena, una peluquería al lado de un hotel turístico que se empeñan en escribir en una pizarra frases que empujan el ánimo hacia arriba, que consiguen cortar la rutina, que sacuden la modorra.
Como una receta, por ejemplo. Una receta para estar mejor.
De la Redacción de Entre Ríos Ahora.