“Vemos con una gran preocupación el plan de ajuste que viene llevando adelante el Gobierno desde que asumió. Empezó por el salario, que están devaluados, un salario inicial que roza la indigencia, y pasando por los ataques que hemos recibido a nuestras condiciones laborales, ataques al régimen jubilatorio, con el aumento que se nos hizo por decreto del aporte personal del 16% al 19%, e incluso haciéndoles aportar a quienes ya se jubilaron. Sumado a eso, ahora, bueno, el ajuste a lo que tiene que ver con las partidas a los comedores, y al transporte escolar rural”, enumera Gimena García, dirigente de la Lista Multicolor, candidata por ese sector a secretaria general de la Asociación Gremial del Magisterio de Entre Ríos (Agmer), que el próximo 25 de septiembre irá a elecciones.

La dirigente se posiciona de frente a la actual conducción de Agmer. “Claramente, nosotros entendemos que es sumamente necesario que el Frente Multicolor, que es la única oposición que hay en la Provincia, vuelva a disputar la conducción del sindicato ante una muestra clara de que la política que viene llevando adelante la conducción de Marcha Blanca ha fracasado. Por eso todas esas medidas de ajuste que hubo en educación, no se pudieron frenar por la política de esta conducción. Acá se militó y se valoró positivamente una paritaria anual en un contexto en el que nosotros sabemos que en nuestro país, si hay algo que no es sostenible, es la economía. Bueno, ahora estamos nosotros acá, atrapados en estos salarios, en esta paritaria anual que nos tiene ahí rozando la indigencia, hundidos en la pobreza, con compañeras que laburan doble cargo, que encima ahora el doble cargo ya no es ocho horas, son diez horas por la implementación de la quinta hora, quinta hora que se dio solo en nuestra provincia porque surgió como un plan piloto a nivel nacional, pero solo Entre Ríos ha titularizado esa quinta hora con todo lo que conlleva también. Hay falta de infraestructura. Es una quinta hora que no vino a garantizar ninguna mejora en la calidad educativa”, plantea García.

 

Abel Antivero, número puesto en Agmer

-¿Marcha Blanca, la agrupación que conduce actualmente Agmer, ha tenido cierta mirada condescendiente hacia las políticas del Gobierno provincial?

-Sí, totalmente. Nosotros lo venimos diciendo desde el día uno y lo hemos dicho en cada uno de los congresos. Claramente la política que asumió la conducción de Marcha Blanca es la misma que tiene la Ctera a nivel nacional, la CTA y la CGT, que es una total inacción y dejar pasar el plan de ajuste, tanto del presidente Javier Milei como del gobernador Rogelio Frigerio. Por eso es fundamental que los compañeros tengan la posibilidad de elegir una conducción con una política sindical totalmente opuesta, que es la que planteamos nosotros desde la Multicolor, que es por principio la independencia de todos los gobiernos de turno.

-Encabezas la lista de la Multicolor, una mujer que busca conducir un sindicato mayoritariamente de afiliadas mujeres pero que viene siendo conducido por hombres.

-El Frente Multicolor a nivel provincial integra distintas agrupaciones, y había un acuerdo en que sea nuevamente yo quien encabece la lista, lo cual para mí es un honor. Pero más allá de que si somos varones o mujeres, nosotros siempre sostenemos que el punto es qué política vamos a llevar adelante, porque si en el Frente Marcha Blanca hubiese una mujer encabezando, la política que llevaría adelante sería la misma, y es contraria a los intereses de los compañeros y las compañeras.

Gimena García dará pelea para conducir Agmer

 

-¿Ves mucha disconformidad en la docencia?

-Sí, hay una gran desmoralización en los compañeros. Cuando recorremos las escuelas se nota falta de confianza en el sindicato. Nosotros creemos que eso tiene que ver mucho con cómo se dio la situación el año pasado, en 2024. Después del receso de invierno, nosotros empezamos a llevar adelante un plan de lucha, donde los docentes salieron masivamente a las calles, movilizamos, justamente con el reclamo de basta de salarios de pobreza. Frigerio tuvo que imponer una conciliación obligatoria para frenar esa lucha, y fueron las familias las que pararon ese famoso 27 de agosto por los docentes no mandando sus hijos a la escuela. Después de la conciliación, las ganas de luchar y seguir movilizándose seguía vivo, y de hecho se habían votado 3 días de paro. Pero fue la propia conducción de Agmer la que dejó en suspenso los paros. Eso nosotros siempre lo recordamos: no fue que los compañeros no queríamos parar más o nos habían golpeado los descuentos. Fue nuestra conducción la que dijo, bueno no, estos 3 paros los dejamos en suspenso y nos sentamos a negociar, y se termina cerrando el conflicto ya a fin de año, con un aumento que no significó nada, que era un 10% del inicial arriba de la indigencia, que es lo que nos lleva ahora a tener el salario que tenemos.

 

De la Redacción de Entre Ríos Ahora