Abel Antivero, candidato por la Marcha Blanca a secretario general de la Asociación Gremial del Magisterio de Entre Ríos (Agmer) en las elecciones del próximo 25 de septiembre, dijo que asumió la tarea “con mucha humildad. Estoy totalmente convencido de que soy parte de un proyecto político sindical”.

En declaraciones al programa Puro Cuento de Radio Plaza 94.7, Antivero analizó el contexto provincial y dijo que ve “con mucha preocupación” las medidas de ajuste tomadas por el Gobierno en el sistema educativo. En particular, se refirió al relevamiento sobre la situación de 300 escuelas rurales y de la zona de islas de nivel primario con vista a bajar de categoría y cerrar establecimientos con baja matrícula. “Nos preocupa porque sabemos que se ha pedido un relevamiento de matrícula de las escuelas. Esto en el marco de lo que ocurre en la ruralidad, con un proceso socioeconómico en el cual algunas empresas forestales han tomado empleados con el requisito de que no tengan hijos y eso, por supuesto, termina implicando en la baja de la matrícula de algunas escuelas”, subrayó.

Abel Antivero, número puesto en Agmer

 

También fustigó la decisión del Consejo de Educación de reglamentar las asambleas escolares y prohibir su realización en horario escolar. “Históricamente nosotros hemos tenido una impronta muy democrática, donde en las asambleas participaban afiliados y no afiliados en cuanto a lo que tiene que ver con definiciones de nuestra política educativa. Nunca nos había pasado esto de que un gobierno cercene la capacidad de expresión. En esto no hay ingenuidad: esta definición del Gobierno se realiza en el medio del proyecto de transformación del Iosper en la OSER. Nosotros fuimos muy críticos de esta política, la cuestionamos, y buscamos concientizar a las bases a través de las asambleas. Vemos un tinte dictatorial la decisión de cercenar la posibilidad de expresarnos”, puntualizó.

-¿Cómo ves la discusión en las asambleas escolares de cara al congreso de Agmer para definir postura en torno a ocupar o no la vocalía en la OSER?

-Esto tiene que ver con nuestra cultura democrática: todas las voces se pueden escuchar, todos los compañeros pueden expresar cómo están viviendo la realidad, su vínculo con la obra social. Se van a dar posturas encontradas y desencontradas, lo que hace un poco más rico el debate. Se trata de una discusión horizontal y no verticalista.

-¿Cuál es tu posición respecto a este tema, ocupar o no ocupar la vocalía en la OSER?

-No me complica expresarme. Las asambleas son soberanas. He tenido posturas a favor de determinada propuesta salarial que después la asamblea de la seccional la ha rechazado. En el caso de OSER, mi posición es que hay que ocupar los espacios porque es un lugar de representación. Es un lugar que hay que ocupar porque hay compañeros que están en una situación vulnerable en lo que tiene que ver con la salud y necesitan capacidad de gestión, capacidad que nosotros perdimos una vez que se llevó a cabo la intervención en el mes de diciembre. Los compañeros quedaron huérfanos en cuanto a la representación.

-El tema salarial es lo urgente entre los docentes, pero el sindicato firmó un acuerdo salarial anual. ¿Eso complica?

-Hay que considerar que el acuerdo salarial se firma a fines de febrero, también con el mismo mecanismo de consulta donde la mayoría de los departamentos expresaron en el congreso y definieron la aceptación. Pero si nosotros hubiésemos firmado un acuerdo con tramos más cortos, hubiese sido muy complejo que se abra esa discusión. Es cierto que el sueldo no alcana. Un docente que ingresa a la actividad cobra un poco más de $600 mil, y vemos un incremento de docentes que están buscando otra actividad económica para mejorar su situación económica. El sueldo no alcanza. Pero eso afecta a la calidad educativa. Sabemos que el docente va preocupado a trabajar sabiendo que está haciendo un mal uso de lo que es la tarjeta de crédito, de que no llega a fin de mes, de que en determinados lugares los índices inflacionarios son mucho más altos.

-Tocas un punto que ya ha sido marcado por otros dirigentes de Agmer: muchos docentes suman empleos para llegar a fin de mes. En Paraná, algunos manejan aplicaciones, como Uber o DiDi.

-Es así. Los docentes se ocupan en diferentes actividades. No les alcanza el sueldo y buscan otras actividades. Nosotros tenemos casos de docentes que se han empleado en la planta de YPF que extrae arena para la planta de Vaca Muerta. Dejan la docente por esa actividad porque les pagan mejor También tenemos casos de docentes que han presentado currículum en lo que es el cordón industrial de Zárate-Campana, en la provincia de Buenos Aires, con la firme intención de dejar la docencia. Los docentes buscan un doble cargo u otra actividad para solventar sus gastos.

 

De la Redacción de Entre Ríos Ahora