«Me voy con dignidad y paz de este lugar que me dio muchas satisfacciones y algunas tristezas. El título también se va conmigo, me acompaña a donde Dios y el destino tienen pensado para mí. Hoy estoy muy en muy bien, y muy segura de la decisión que tomé. Gracias por transitar este camino conmigo».
De ese modo, y por mensaje de whatsapp, se despidió de sus amigos la ahora exdefensora oficial del Poder Judicial Paula Montefiori. Había llegado en 2014 como funcionaria sin estabilidad ni concurso, y su permanencia en la Justicia estuvo atada todo este tiempo a una simple resolución administrativa. La situación de su esposo, Juan José Canosa, que presidió Sistema de Crédito de Entre Ríos (Sidecreer) entre 2009 y 2015, y con dos causas en la Justicia, la dejó en una situación harto incómoda.
Las dos investigaciones, a cargo de los fiscales Santiago Brugo y Juan Francisco Malvasio, ponen contra las cuerdas a Canosa, ahora asesor legal de la Cámara de Diputados, que preside Sergio Urribarri. Pero también comprometen a su esposa. En enero último, la Justicia ordenó un allanamiento en el departamento de la madre de la exdefensora oficial, Sofía Montefiori, en calle Buenos Aires, y halló material relacionado con la causa Sidecreer.
Eso es en torno a la causa por negociaciones incompatibles con la función pública, que alcanza a buena parte del clan Canosa: su hermano, la mujer de su hermano, la suegra de su hermano, la cuñada de su hermano, el esposo de la cuñada de su hermano. Pero el matrimonio Montefiori/Canosa se vería comprometido de lleno en la causa por enriquecimiento ilícto, que ahora empezó a cobrar ritmo con los cuatro allanamientos a sendas mutuales que ordenó la Justicia el jueves.
Montefiori negó que haya sido despedida, sino que ella presentó la renuncia al Poder Judicial. Y esa versión la confirmó oficialmente su jefe, el defensor general del Poder Judicial.
Benítez: «No tenía motivo para pedirle la renuncia»
Luego de que se conociera el alejamiento de Montefiori, comenzó a circular una información que indicaba que en realidad no renunció, sino que el titular del Ministerio Público de la Defensa, Maximiliano Benítez, le había pedido la dimisión.
En diálogo con Entre Ríos Ahora, el Defensor General desmintió la información, a la que calificó de “errónea” y aseguró que lo tomó por sorpresa la renuncia de Montefiori. Destacó que fue una “excelente defensora”.
“No es correcta la información. La doctora Montefiori renunció por cuestiones personales, yo en ningún momento le pedí la renuncia”, dijo Benítez este viernes ante la consulta de Entre Ríos Ahora.
En ese marco contó que “ella ayer por motu propio renunció, yo la verdad que no tenía ningún motivo para pedirle la renuncia. Ella me puso en la carta de renuncia que por motivos personales presentó la renuncia al interinato que está ejerciendo”.
Enseguida, el Defensor General destacó el trabajo de Montefiori: “Ha sido una excelente defensora y cumplió las funciones correctamente.”.
Preguntado sobre cómo se reemplazará a Montefiori, Benítez dijo que aún no tiene un nombre en carpeta: “Voy a ver con quién la reemplazo, porque me sorprendió –la renuncia-, asíque no tengo decidido como voy a hacer el reemplazo. Ya están llamados a concurso esos cargos por el Consejo de la Magistratura, pero los exámenes seguramente van a ser dentro de unos meses. No hay fecha todavía”.
A raíz de la vacante que queda tras la salida de Montefiori, señaló que nombrará a un defensor interinamente “porque el lugar ese requiere ser reemplazado y no puedo esperar tanto tiempo”.
De la redacción de Entre Ríos Ahora