El cartel, inclinado, a punto de caer, dice: «Aguas profundas». Atrás, enseguida nomás, está el río, y al costado, un chancho que duerme, plácido, un sueño profundo, bajo el sol de mediodía. Un sueño profundo que nada ni nadie altera.
De la Redacción de Entre Ríos Ahora.