El Vivero Municipal, ubicado en el Acceso Norte, contiguo al Parque Botánico, llevará el nombre de María Lourde Cura, expresidenta de la Asociación Amigos del Ábol.

María Lourdes Cura, incansable defensora y amante de los árboles de Paraná, había nacido en San José de Feliciano, a sus 17 años se mudó a la capital entrerriana, donde presidió la Asociación Amigos del Árbol. Falleció el 27 de abril de 2016.

A través de la Ordenanza Nº 9638, el presidente municipal Sergio Varisco designó con el nombre de María Lourdes Cura al Vivero Municipal ubicado en el paseo Parque Botánico Leandro N. Alem, ubicado en el Acceso Norte y su intersección con la calle Tarnowsky.

 

La Secretaría de Cultura de la Municipalidad de Paraná realizó este miércoles un homenaje a María Lourdes Cura y al exintendente Humberto Varisco por su labor como protectores del arbolado paranaense.

Con la presencia de familiares, amigos, autoridades municipales y provinciales se realizó un emotivo acto este miércoles en Plaza 1º de Mayo, donde se descubrió una placa recordatoria al pie del retoño del olivo, brote histórico del Monte de los Olivos, traído por los Jesuitas en el Siglo XVII a Paraná.

Participaron del acto funcionarios municipales, la secretaria de cultura Magda Varisco, el periodista y escritor Roberto Romani, el párroco de la Catedral, Eduardo Tanger, y la hija de María Cura, Saida Martínez Cura, entre otros.

María Lourdes Cura fue presidenta de la Asociación Amigas del Árbol e inspectora cuida árboles honoraria de la Municipalidad de Paraná.

La secretaria de Cultura Magda Varisco destacó que “tanto Humberto (Varisco) como María (Cura) son dos fuerzas importantes, formaron un gran dúo en defensa de los árboles”.

Por su parte Roberto Romani sostuvo que “en las figuras de María y Humberto estamos homenajeando a muchas mujeres y hombres que se han preocupado por plantar árboles en la ciudad y también es un hermoso ejemplo para los niños de esta generación que vean que estamos preocupados por los árboles y la vida, porque cuando un niño se acostumbra a cuidar un árbol valora para siempre la vida”, afirmó.

Finalmente Saida Martínez Cura, se mostró muy emocionada con este reconocimiento. “Más que merecido porque toda la ciudad sabe quién era mi madre, siempre en defensa y lucha contra los árboles y defendiendo la naturaleza”, señaló.