Los seis barrabravas de Patronato que acordaron con el Ministerio Público Fiscal aceptar los cargos en su contra y ser condenados en un juicio abreviado por haber agredido a chicos y adultos de un club de Strobel, y a policías, deberán esperar hasta el 6 de febrero para conocer la sentencia.

Tal como había adelantado Entre Ríos Ahora, este miércoles se llevó a cabo una audiencia ante el juez de Garantías Mauricio Mayer, donde los fiscales Ignacio Aramberry y Cristian Giunta le informaron sobre el acuerdo alcanzado con los abogados de 6 de los 13 barrabravas imputados de los delitos de coacciones agravadas por el uso de armas, robo agravado y lesiones graves, todo en un contexto de un espectáculo deportivo. El magistrado dispuso que se prorrogue la audiencia de dictado de sentencia para el 6 de febrero, a las 8.

El fiscal Giunta dijo que con  Héctor Burgos, Jorge Luna y Gustavo Ríos, acordaron una pena de dos años y seis meses de prisión de ejecución condicional por ser responsables del delito de coacciones, robo, lesiones graves y leves, todas en concurso ideal y durante un espectáculo deportivo en violación a la ley 24.192.

Para César Follonier, Claudio “Muñeco” Villagra, y Ezequiel Luna el acuerdo dice que se los condene a 3 años de prisión condicional e inhabilitación para concurrir a espectáculos deportivos por el doble de la condena.

Además, el representante del Ministerio Público Fiscal remarcó que también se acordó la imposición de pautas de conductas por el término de 2 años. Ellas son: deberán fijar domicilio en Paraná, y no podrán cambiar sin autorización judicial; deberán comparecer en fiscalía cada seis meses; se les prohibirá acercarse a menos de 200 metros al club Patronato –excepto al imputado Ríos que vive a 80 metros-, y a los domicilios de denunciantes y testigos; también se les prohibirá realizar actos molestos sobre jugadores o a través de otras personas. Por último, deberán realizar tareas no remuneradas  a favor de una entidad que determine la Oficina de Medios Alternativos (OMA) o un aporte al Hospital de Niños de la ciudad de Paraná.

Qué hizo cada barra

El fiscal Giunta fue el encargado de dar a conocer el texto del acuerdo alcanzado con los imputados. A grandes rasgos, el documento dice que el 25 de noviembre, alrededor de las 17, en el estadio Presbítero Bartolomé Grella, cuando se disputaba el partido de fútbol de primera división de la Superliga de AFA, entre Patronato y Unión de Santa Fe, los 13 imputados, entre ellos los seis que llegaron al  abreviado, y otras 40 personas aún no identificadas, ingresaron violentamente a la tribuna que da sobre calle Ayacucho donde agredieron a policías, chicos y adultos del Club Atlético Deportivo Strobel, del departamento Diamante. Estos últimos habían asistido al estadio a través del programa “Los gurises van a la cancha”, que instrumenta el Ministerio de Desarrollo Social de la provincia y habrían sido confundidos con hinchas de Unión.

En la lectura, el fiscal precisó que la ola de hinchas violentos estaba encabezada por Claudio “Muñeco” Villagra y César Follonier. Este último se había hecho conocido en octubre, cuando se difundió un video en el que arengaba de modo violento a hinchas de Boca que compraban entradas para el partido con Patronato.

Más adelante, el fiscal también dio precisiones al juez Mayer sobre las acciones que cada imputado cometió en la batahola. Por ejemplo, indicó que Maximiliano Altamirano, Cristian Ruhl y Carlos Gustavo Bravo agredieron a los pibes y adultos que estaban con la bandera “Los gurises van a la cancha”; y que en ese contexto caótico y violento Villagra robó la bandera de la delegación y otros golpearon a funcionarios policiales y adultos del club de Strobel.

Además, dio detalles de las lesiones que sufrieron los chicos y las heridas que se le provocaron a los policías. Asimismo, Giunta remarcó que gracias a las grabaciones de la policía y las filmaciones de los medios que trasmitían el partido, más la rueda de reconocimiento del pasado 5 de diciembre, se logró identificar el aporte que realizó cada uno de los barras en los hechos de violencia.

A su tiempo, el fiscal Aramberry dijo que la conducta directriz del hecho fue la coacción y que se buscó imponer la voluntad sobre las víctimas. “Todo se dio en un mismo hecho normativo y la conducta que se destaca resulta ser la coacción entendida como amenaza, no sólo a través del insulto, sino también a través de la violencia física”, señaló.

Luego vino una formalidad. Los abogados defensores ratificaron el acuerdo, y el juez Mayer solicitó a cada imputado que reconozcan su firma en el acta del juicio abreviado pactada con la fiscalía. Todos reconocieron haber suscripto el documento en el que reconocen ser culpables de los hechos que se les imputan.

Satisfecho ese requisitos para homologar el juicio abreviado, el juez Mayer dijo que todavía hay “cuestiones que precisar” antes de dar su sentencia. Dijo que el caso requiere la comprobación de las imputaciones en base a prueba y propuso dejar el dictado de la sentencia para luego de la feria judicial, que finaliza en febrero.

“En este acuerdo que se me ha presentado puede suceder que yo entienda que las calificaciones o el abordaje del caso puede ser irrito o que no hay suficiente prueba o que no fue subsumido suficientemente el hecho”, explicó el magistrado.

Por esa razón, el juez Mayer dispuso que se prorrogue la audiencia de dictado de sentencia para el 6 de febrero, a las 8. Así, los seis barrabravas deberán esperar. Mientras, continuarán con prisión domiciliaria, al igual que los demás acusados. La medida vence a mediados de febrero, por lo que se consideró justo que la sentencie sea dictada ese mes.

Los acusados que no accedieron al abreviado, aún, son: Diego y Enzo Martínez, Carlos Bravo, Sandro Godoy, Facundo y Maximiliano Altamirano y Cristian Andrés Ruhl.

Quién es quién en el abreviado

Gonzalo Núñez
Especial para Entre Ríos Ahora