La expresidenta del Consejo General de Educación (CGE), Claudia Vallori, salió a quejarse públicamente del ajuste que se aplica Educación en sus políticas educativas, en particular por la eliminación de un programa que se creó durante su gestión, y que despertó enseguida la polémica: los polos de reingreso en la escuela secundaria.
«Otra vez los chicos, los jóvenes víctimas de aggiornamento a modelos que sólo profundizan las desigualdades, a decisiones de funcionarios que quieren borrar lo que otros hicieron .. primero se suspendieron las aperturas y ahora se dejan sin efecto los Polos de Reingreso …y así sucederá, vendrán otros, muy pronto, y nuevamente quedarán entrampados los jóvenes como victimas de los cambios o de dejar sin efectos políticas educativas anteriores», publicó Vallori en su muro de Facebook.
Raro: esos Polos de Reingreso se suprimieron en 2016, cuando Vallori todavía formaba parte de la gestión como directora de Planeamiento Educativo.
A través de la resolución N° 650, del 16 de marzo de 2015, firmado por Vallori, y los entonces vocales políticos del CGE Héctor de la Fuente, Joel Spizer y Blanca Azucena Rossi, se dio forma a los denominados “Polos de Reingreso al Nivel Secundario”, destinados, según el texto de la norma, a adolescentes de entre 15 y 17 años “que presentan situaciones de repitencia y se encuentran fuera del sistema por abandono”.
La idea es que los estudiantes secundarios que hubieran dejado los estudios sin concluir pudieran retomarlos, y para eso se puso en práctica un sistema flexibilizado. En los Polos de Reingreso los docentes que dictaban clases eran los mismos que ya trabajaban en la escuela, aunque en otra tarea: así pasaron a denominarse tutores pedagógicos.
Respecto del lugar de ubicación de esas escuelas para repitientes, el texto de la resolución del CGE aclaró que la escuela que requiera la apertura del “Polo de Reingreso al Nivel Secundario” debe contar “con espacios y equipamiento mobiliario mínimo para llevar adelante la propuesta”.
Pero enseguida aclaraba que el horario de funcionamiento será “de lunes a viernes en donde la institución tenga espacios disponibles. Los turnos para el desarrollo de las trayectorias podrán ser seleccionados de manera flexible (matutino, vespertino, nocturno o intermedio”.
Entre sus objetivos, el plan de estudios para repitientes fijó el de “crear nuevos espacios de inclusión, permitiendo la reinserción al nivel secundario en el ciclo básico común de adolescentes y jóvenes de entre 15 a 17 años que presentan situaciones de repitencia y se encuentran fuera del sistema por abandono”.
Enseguida se escucharon las voces críticas. Entre ellas, la exvocal gremial del CGE y actual secretaria general de la seccional Paraná de la Asociación Gremial del Magisterio de Entre Ríos (Agmer), Susana Cogno, que calificó la iniciativa como «una experiencia de dudosa condición pedagógica, una política focalizada que no trae posibilidades de igualdad en el acceso al conocimiento”.
Vallori fue presidenta del Consejo de Educación entre 2013 y 2015, y su gestión se caracterizó por una fuerte inquina con los sindicatos docentes, principalmente con Agmer.
A comienzos de septiembre de 2015, mientras un congreso de Agmer sesionaba en Concordia que votaría un paro de 72 horas, Vallori reunió a todos sus funcionarios en un camping en las afueras de Paraná donde hubo bailes y mariachis.
En realidad, con la asunción de Gustavo Bordet al frente del Poder Ejecutivo, Vallori siguió siendo funcionaria de Educación: hasta noviembre de 2017 -cuando llegó Marta Landó al CGE- ocupó el cago de directora de Planeamiento Educativo, función que mantuvo hasta que se jubiló.
La supresión de los Polos de Reingreso, medida que ahora cuestiona, ocurrió durante la gestión de José Luis Panozzo en Educación, y cuando Mónica Palacios estuvo al frente de la Dirección de Educación Secundaria. Entonces, Vallori formaba parte de una gestión que ahora, tardíamente, cuestiona.
De la Redacción de Entre Ríos Ahora.