Alrededor de 30 paranaenses formalizaron hoy su renuncia a la Iglesia Católica, en una nueva acción de Apostasía Colectiva Entre Ríos. Bajo el lema «No en mi nombre», se hicieron presentes en la sede del Arzobispado de Paraná e iniciaron el trámite formal para ser borrados de los registros de bautismo. La actividad se dio en forma previa al inicio del juicio al cura Justo José Ilarraz, el lunes 16, que carga con siete denuncias por abuso y corrupción de menores.

 

 

De la Redacción de Entre Ríos Ahora.