El presidente del Superior Tribunal de Justicia (STJ) Emilio Aroldo Castrillón, se metió en el debate en torno al proyecto de despenalización del aborto y sostuvo que la legalización “lisa y llana del aborto, me parece excesiva”
El titular del máximo tribunal provincial no rehusó meterse en la discusión pública sobre la despenalización de la interrupción voluntaria del embarazo que se está debatiendo en el Congreso de la Nación y se mostró partidario de que el aborto no punible tenga “una regulación aggiornada a la realidad actual, no a la época del Código Penal, que es cuando se implantó a la impunibilidad. En esa época mirábamos ‘El Zorro’, hoy los chicos juegan a la play. No es la misma situación, la sociedad ha cambiado en algunas cosas para bien y en otras para mal”, aseguró.
“Yo creo en una no punibilidad más extendida que la existe hoy en casos puntualmente regulados”, explicó Castrillón, en declaraciones a la Agencia Periodística Federal (APF).
Al respecto, Castrillón apuntó: “Hoy hablamos del embrión y la posibilidad de unir un óvulo con un espermatozoide fuera del cuerpo de la mujer y luego introducirlo. Entonces, al ingresarlo en la mujer ¿es persona o no es persona? Estamos hablando del valor de la persona que lo porta y del valor de la persona que es portada y el valor de esta última persona debe ser defendido por un defensor”.
“En el juego del valor de la persona portada y de la libertad de la persona portadora debe estar el análisis de la no punibilidad. No en el libertinaje. El libertinaje no soluciona nada”, sentenció.
Otra integrante del STJ, Susana Medina de Rizzo, no quiso dar a conocer su postura personal cuando fue entrevistada en mayo último por Infobae.
La jueza sostuvo que ve «con mucho interés» el debate en el Congreso. «Y celebro que se dé ese debate que hacía tanto tiempo que debía darse. Porque hay realmente opiniones muy valiosas, opiniones encontradas muy valiosas», aseveró.
«Tengo opinión personal -dijo- pero por cuestiones lógicas no la comparto. Nunca me ha tocado resolver el tema». Pero enseguida aclaró que «es injusto penalizar a la mujer pobre, porque la que llega a hacerse un aborto en malas condiciones es la mujer pobre. Porque la mujer que tiene instrucción o que tiene medios materiales, tiene posibilidades de hacerlo en silencio y de manera segura. En cambio usted ve que las que llegan y las que además son penalizadas son las mujeres pobres».
De la Redacción de Entre Ríos Ahora.