Con una multitud de jóvenes en Plaza 1° de Mayo, concluyó pasada la 1 de madrugada de este viernes el Festival organizado por la Municipalidad de Paraná en conmemoración del centenario de la Reforma Universitaria de 1918.
En el cierre, actuaron las bandas Eruca Sativa, El Kuelgue y Miss Bolivia. Los jóvenes estudiantes colmaron desde la tarde el lugar cercano al escenario y la vigilia se vivió como una fiesta democrática.
Eduardo Solari, secretario General y de Derechos Humanos consideró que se vivía «una gran fiesta, en uno de los acontecimientos más importantes de la historia argentina, como fue de la mano de Hipólito Yrigoyen que en 1918 se logró abrir la universidad a la gran mayoría del pueblo y democratizar la vida universitaria y de alli en más tenemos la universidad de excelencia que hasta hoy nos acompaña».
El concejal Carlos González (Cambiemos) consideró que se daba «un encuentro fantástico porque juntamos lo viejo de la historia con lo nuevo de la juventud y es una simbiosis que la estamos disfrutando con música y como una fiesta».
La concejal Karina Llanes (Cambiemos) destacó «la convocatoria que ha sido muy grande, y que estamos felices porque no lo hicimos solos sino con los centros de estudiantes universitarios que han participado de la comisión de trabajo y de la selección de las cuatro bandas soporte que fueron locales y con una feria de emprendedores universitarios funcionando en la Peatonal. Agradecemos al intendente Sergio Varisco que sin él este evento no se hubiera podido llevar a cabo y marca el compromiso suyo en el comienzo de su gestión cuando al asumir en la sesión de apertura del Concejo Deliberante el hablaba que se venía el centenario de la Reforma Universitaria y dispuso del decreto que imponía enmarcar a Paraná en ese festejo del centenario y hoy se está concretando».
Luis Beber, subsecretario de la Juventud destacó a las figuras que lograron tanta convocatoria: «Estamos satisfechos de haber conseguido estos artistas de gran renombre; con sus representantes llegamos a un acuerdo económico hace ya un tiempo y ellos estuvieron desde el comienzo muy interesados de participar de esta fiesta, de lo que representa esta fecha, como lo es el centenario de la Reforma Universitaria. Hubo buena predisposición desde el inicio y se ve el fruto esta noche, que a pesar del frío no amedrentó al público a venir. Se vio un público universitario muy contento que ha colmado la Plaza de Mayo».
A medianoche, y previo a la actuación de Miss Bolivia, subieron al escenario los organizadores y representantes de los distintos centros de estudiantes para entonar las estrofas del Himno Nacional, al cumplirse el 15 de junio un siglo del movimiento estudiantil que cambió la historia de la educación superior en Argentina y la región; introdujo la libertad de cátedra y el cogobierno de docentes, graduados y estudiantes.
El cierre pasada la medianoche lo tuvo Miss Bolivia que habló ante la prensa sobre su presencia en la capital entrerriana: «La pasé muy feliz. Antes de venir averigüé cuantos grados había y decía muy frío y cuando vine era muy caliente en realidad y todo tenía que ver con la gente. Estoy super agradecida, orgullosa y honrada de haber sido convocada para este festejo que tiene que ver con algo que me representa que son los derechos individuales estudiantiles y justo se fusionan con esta otra vigilia que vinimos trayendo desde hace mucho tiempo, con la legalización de la media sanción del aborto, así que conjugar todo en un festejo un jueves a la noche de frío lo hizo enorme y cálido».
Dijo que la fecha de la Reforma Universitaria le toca de cerca, habiendo sido psicóloga: «He sido estudiante y docente universitaria y es algo que me convoca en mi militancia y en mi rol. Si cada profesional si pudiese y quisiere estaría buenísimo que pase por la docencia porque es una experiencia enriquecedora y donde nunca parás de aprender, así que venir acá y compartirlo desde otro lugar que es el escenario a mi honra y me hace crecer un montón. Siento que la organización estudiantil nunca deja de evolucionar y transformarse y se generan mayores desafíos. Estar acá fue como un gran pelotero para jugar el juego de la cultura y el juego de los derechos. Estuvo buenísimo».