«Es verdad que el intendente y el vice intendente Armando Gay se han manifestado públicamente a favor y en defensa de la vida y han marchado junto a sus familias y expuesto sus posturas desde el primer momento, pero debe quedar en claro que las decisiones que el jefe municipal toma son acordes a la sociedad y no en por una creencia personal”.

De ese modo, la coordinadora de gabinete de la Municipalidad de Concordia, María de los Ángeles Petit, defendió la decisión del intendente Enrique Cresto de dictar un decreto que nombra a Concordia como «ciudad pro vida». Fue a partir de la decisión del jefe comunal de revalidr por decreto la adhesión al denominado Pacto de San Antonio de Padua, firmado el 13 de junio de 2016, y ya avalado por el Concejo Deliberante.

“En principio, debe quedar en claro que el Pacto no tiene absolutamente nada que ver con el tema del aborto”, afirmó. “Se mezclaron y tergiversaron todos los temas en pos de una movida política”, dijo, según recogió el sitio Diario Junio. “El Pacto se firmó hace dos años,cuando era inimaginable aun en una agenda política la cuestión del aborto. Y lo mismo pasó con el proyecto de Pro Vida”, recordó Petit. “El primero fue firmado entre casi todos los intendentes de la provincia de Entre Ríos y el segundo fue un proyecto que propuso el concejal, Alberto Zadoyko, en la gestión de Gustavo Bordet y que en ese momento directamente quedó a un lado”, explicó.

Petit, junto al intendente Cresto y el vice Gay, en la reunión con los provida, el miércoles 18.

 

“Esta ultima vez, fue un grupo de pastores el que trae el tema nuevamente y lo presenta directamente en el cuerpo legislativo. No pasó nunca por el Ejecutivo”, aclaró. “Se votó y se perdió. Punto”

«Nos comprometimos con el viceintendente (Armando Luis Gay) a dictar un decreto desde el Municipio de Concordia, confirmando el compromiso con el Pacto de San Antonio de Padua en todos sus términos. No solamente en la defensa de la vida desde la concepción, y la defensa de las dos vidas, sino en todos sus términos”, anunció este miércoles el intendente Cresto.

La idea de ciudad “pro vida” no había prosperado en el Concejo Deliberante. De los 13 concejales que integran el cuerpo deliberativo, 5 se manifestaron pro vida, 6 votaron en contra, 1 se abstuvo y el último, faltó a la sesión del 13 de junio último.

Petit aclaró que la revalidación de Cresto al pacto “de ninguna manera va a volver a pasar por el Concejo Deliberante”, sencillamente porque ya se firmó y se avaló. “Yo entiendo que después algunos concejales se hayan tirado para atrás o dudado cuando surge el tema de la despenalización del aborto a nivel nacional. Sobre todo por el punto 5 que habla de la defensa de la familia y la vida desde su concepción y es el que genera disturbios. Pero ya está; ya se firmó”, subrayó. “El resto de los puntos y el decreto en general trata sobre un compromiso que hace el intendente con objetivos que en definitiva son del bien común: como la lucha contra el narcotráfico y las adicciones, habla de inclusión, de la protección de los niños y las mujeres, etc”, explicó.

El Pacto tuvo el impulso del intendente de Merlo, Gustavo Menéndez (Frente para la Victoria), y en Entre Ríos, una de sus principales espadas es el jefe comunal de Concordia, Enrique Cresto, y tiene su fundamento teórico en los lineamientos expuestos por Francisco en la encíclica Laudato Si (“Alabado sea”).

El documento que dio origen al movimiento de seguidores de Francisco se dio a mediados de enero de 2016 en la iglesia franciscana de San Antonio de Padua, que se coronó con un asado a la quinta municipal “La Colonial”. Después, se replicó en varios puntos del país, y en Entre Ríos, el exobispo de Gualeguaychú, Jorge Lozano, encabezó un acto de ese tenor.

El Pacto de Padua contiene estos diez puntos: 1) combate del narcotráfico; 2) prevención de la drogodependencia; 3) lucha contra el hambre; 4) combate contra la violencia de género; 5) defensa de la familia y rechazo al aborto; 6) impulso de las energías renovables; 7) combate de la pobreza; 8) acceso universal a la salud, la educación y el agua potable; 9) erradicación del abuso infantil y la trata de personas; 10) creación de observatorios para “tareas de cambios de paradigmas, de conductas individuales y colectivas”.

 

 

 

 

 

De la Redacción de Entre Ríos Ahora.