«Hacete amigo del juez / no le des de qué quejarse». Los versos del Martín Fierro, de José Hernández, reflejaron la picaresca nacional, puestos en la boca del Viejo Vizcacha, un persona ventajero. «Y cuando quiera enojarse/ vos te debés encoger,/pues siempre es güeno tener/ palenque ande ir a rascarse.». A diario, la Justicia batalla por sacarse de encima lo que la calle le endilga: gozar del calor del poder más de lo aconsejable. Y, claro, así, los que caen son los menos, los pocos, y los muchos se pavonean por los pasillos lustrosos.
De la Redacción de Entre Ríos Ahora.