Este viernes 12 de agosto toca en Paraná Adrián Cayetano Paoletti. Con cinco discos a cuestas, un centenar de canciones y colaboraciones con Gustavo Cerati, viene a compartir escenario con Los Licuados. Será esta noche en Limbo Pub. A continuación un repaso por sus discos y canciones.
Por Luciano Mete
Adrián Cayetano Paoletti formó parte entre 1987 y 1992 de Copiloto Pilato, uno de los grupos del rock “poético” de fines de los ochenta como Don Cornelio y la Zona, Los Pillos, Los Corrosivos y Los Visitantes, previa de lo que después fue el “Nuevo Rock”, con Juana La Loca, Los Brujos, Suárez, Babasónicos, Peligrosos Gorriones y Demonios de Tazmania. De todos esos grupos, tal vez sean Don Cornelio y Peligrosos Gorriones con quienes se pueda hacer una línea de continuidad. Lo oscuro y surrealista de las letras de Adrián tienen un reflejo en las letras de Palo Pandolfo y Francisco Bochatón. Y la música también.
Copiloto Pilato era de todas maneras un grupo único, con influencias del punk, el post punk, la new wave y la poesía beat, como Television. Dejó unos demos, algunas canciones y un disco grabado, “La misma Tierra”, del año 1992, algunos videos en vivo y un documental. Su obra, rescatada por los grupos de hoy como un “culto”, habla de lo que era Copiloto Pilato: más que un grupo de rock, un grupo que proponía una renovación estética y que repetía a todos que el rock es libertad. Un grupo “beatnik”, escribió Pablo Shanton.
“Despierto temprano, mañana sin sol, qué me dará este día que no me dio el anterior, una lluvia de fuego, un disparo de amor, una lluvia de escombros sería mejor, mejor o peor…días de gloria se esconden tras nosotros” (Buenos días, Copiloto Pilato,1992)
Pero un día Copiloto Pilato se separó y Paoletti, que nunca dejó de hacer canciones, empezó una carrera solista cuando nadie lo hacía, y casi sin proponérselo. Así grabó Paciencia (1995), En la ruta del árbol en busca de la canción perfecta (1998), Soy yo por ahora (2000), Casa rodante (2011) y Los mandos no responden, aumentaré la potencia al máximo (2014). Siempre dentro de su sello (Cecilia Discos) y siempre rodeado de amigos y músicos que compartían sus grabaciones artesanales (con introducciones instrumentales, experimentación con efectos, low fi). Migue Castro (ex Victoria Mil hoy en UN), Fernando Lamas (Estupendo), María Fernanda Aldana (El Otro Yo), Rosario Bléfari (Suárez) y Gonzalo Córdoba (Suárez) aparecen en sus canciones.
“Otra vez no ya te lo dije migas en la cama, y guardaste la casa en una valija, tenías mucha prisa… y con el cielo como techo desperté, ya no puedo aburrirme mirando a la pared… sin lugar donde colgar mis cuadros, y toda la casa es una gran ventana, el viento entra sin golpear solo golpea mi cara, y toda la casa es un gran jardín, el perfume de las flores se despereza en mi nariz, y ahora no entiendo si estoy afuera o estoy adentro” (Te enojaste, Casa rodante, 2011)
Otra colaboración fue con Gustavo Cerati que convocó a Paoletti para escribir en “Fuerza Natural” (Magia, Amor sin rodeos, Sal). Cerati buscaba alguien que lo ayude a terminar las letras de su disco “psicodélico, campestre y astral”.
Parte de 107 Faunos, Valentín y los Volcanes, Los Espíritus y Viva Elástico lo acompañó en los festejos por los veinte años del disco Paciencia. Grupos de sellos como Laptra o Triple RRR lo señalan como influencia. El rock independiente de hoy lo incluye en sus festivales y compilados. Paoletti pareciera ser más que un padrino un hermano mayor para quienes ven en la música un hecho artístico y no comercial. Obra antes que mercancía.
“Soy el suelo que espera todo lo que cae : la tierra. Y si la luna se come sola, aún hay esperanzas. De mis costillas nada salió, es más, son una celda. Podría hacer una espada o una vara, un bastón, tal vez una regla. Izar las velas o remontar este imán, tanta quietud, no ahoga ni entierra.” (Gravedad, 1998)
Quienes caminaron los festivales alternativos de los noventa, las plazas, los centros culturales, seguramente lo vieron en vivo, como un bicho raro entre los raros. Sus cassettes y sus discos estaban ahí en las ferias, las reseñas de sus canciones aparecían en las revistas y los suplementos.
Sin nostalgia, produciendo como siempre y como siempre pensando en la próxima canción (“la canción perfecta”) Paoletti sigue haciendo discos (está en plena grabación de uno) y viene por primera vez a Paraná. Ojalá puedan estar ahí. Es el viernes 12 de agosto en Limbo (Gúemes y Liniers) y con Los Licuados.
Para escuchar:
www.adrianpaoletti.bandcamp.com
www.loslicuados.bandcamp.com