El sistema de control de licencias docentes por enfermedad, que comenzó a regir el 1° de abril en la provincia, no está reportando los beneficios que se esperaban, según analizó este miércoles, en Colón, la Asociación Gremial del Magisterio de Entre Ríos (Agmer). Por el contrario, según el gremio se transformó en una práctica de control «policial» sobre el trabajador de la educación con una excesiva injerencia de los 30 médicos auditores controlados en los distintos departamentos que «exceden» facultades y hasta aplican sanciones a maestros y profesores.
«Las modificaciones del sistema de Comisiones Médicas –que valoramos necesarias, aunque desde una concepción de prevención, atención y promoción de la salud- tiene un objetivo preciso: ´lograr un mejor control´. Se auditan los cuerpos, los tiempos y los movimientos de quienes padecen en su integridad las condiciones de desigualdad y exclusión de las políticas de ajuste. No compartimos esa mirada», dice un comunicado que se conoció al término del encuentro que se desarrolló en Colón y que congregó a los 17 secretarios generales de las conducciones departamentales.
«Se otorgan facultades al médico auditor que se extralimitan de su función, aplicando sanciones y habilitando así intromisiones sobre la carrera docente y contradiciendo artículos del Régimen de Licencias; y los artículos 64 y 67 del Estatuto del Docente en lo atinente a sanciones y desconociendo los mecanismos y las funciones del Tribunal de Disciplina del Consejo General de Educación. Tampoco los médicos cumplen con su carga horaria estipulada por sus propios contratos con el Estado y reemplazan las visitas domiciliarias con nuevas citaciones que desnaturalizan totalmente su función y reemplazan la atención médica por un control que no resguarda la salud sino que la expone a nuevas afecciones y perjuicios», señala el documento de Agmer.
La queja va dirigida a la aplicación del decreto N° 426. Esa norma aprobó un convenio marco de colaboración con el Ministerio de Gobierno para llevar adelante el control de licencias médicas docentes. “El régimen vigente de control de licencias por enfermedad se encuentra colapsado, existiendo una demora en las citaciones para revisión que muchas veces supera ampliamente el plazo de la licencia solicitada, lo que genera conflictos con aquellas situaciones que luego no son reconocidas tornando ineficiente el control de las mismas”, dice el texto del decreto.
Este martes 2 de julio, Agmer volvió a cuestionar el sistema de control de licencias por enfermedad, cuya implementación, aseguró, se hizo de manera “inconsulta, arbitraria” y con “miradas que estigmatizan el uso de licencias docentes por razones de salud y aplicando concepciones de ajuste sobre los trabajadores de la educación”. Así, “y ante los evidentes atropellos que ya la redacción de estas normas anticipaban sobre el Estatuto del Docente y el propio Consejo General de Educación, al introducir un agente externo al sistema –los médicos auditores– con pretendidos poderes de sanción contra los docentes, desde el sindicato se logró la redacción de la Resolución 1590/19 CGE, la cual venía a poner límites a los abusos y resguardar los procedimientos relativos a la tramitación de las licencias por enfermedad de corto tratamiento”.
Sin embargo, dijeron desde Agmer, “desde la emisión de dicha Resolución el pasado 17 de abril los médicos que intervienen en el nuevo sistema pasan por encima de la norma, interviniendo sobre sus procedimientos con el aval de ´disposiciones´ de distintas Direcciones Departamentales de Escuelas, lo cual no ha hecho más que sembrar confusión e incertidumbre entre los docentes y equipos directivos de las escuelas, distorsionando así lo normado por su propio órgano rector”.
Este miércoles 3, en Colón, el pleno de Agmer resolvió efectuar presentaciones de «instrumentos legales en las Direcciones Departamentales (de Educación), en dirección del efectivo cumplimiento de la Resolución 1590, el cese de los abusos denunciados y en resguardo de la salud de los docentes». Y, además, se exigió «la inmediata derogación del Decreto 426/19 y su reemplazo por una norma acordada con los trabajadores de la educación y la urgente convocatoria a la Comisión de Prevención de la Salud Laboral Docente». Ya en marzo Agmer había pedido que se deje sin efecto el control.
“Lo que planteamos –dijo Marcelo Pagani, titular de Agmer- es que se hace necesario trabajar en forma seria en la salud del trabajador. Y para eso se requiere contar con un relevamiento que nos dé cuenta de las enfermedades prevalentes en el trabajo docente; una vez detectadas, que se haga un trabajo de prevención; y después, sí, el control. El problema que como está planteado este control que se está haciendo es inaplicable”.
En diálogo con el programa Puro Cuento de Radio Costa Paraná 88.1, Pagani dijo que en toda la provincia se contrataron 30 médicos auditores, y estaba previsto que en 55 lugares –hospitales, centros de salud- se pudieran validar los certificados por enfermedad. Ese número se bajó a 30, y las horas semanales de trabajo que se exigen a los auditores, 15, no se cumplen. “Además, los médicos se están tomando atribuciones que son propias del Tribunal de Disciplina del Consejo de Educación. Tampoco se cumple con la obligación de hacer la visita domiciliaria al docente que está enfermo. Se debe acompañar al compañero, no ejercer esta actitud de policía”, planteó.
De la Redacción de Entre Ríos Ahora.