Los choferes de colectivos agrupados en la Unión Tranviarios Automotor (UTA) resolvieron volver a las medidas de fuerza desde este miércoles.

La retención de servicios se extenderá de 8 a 12 por la mañana y de 15 a 19 por la tarde, con lo cual la medida de fuerza se extiende. A principios de mes, la modalidad había sido de 8 a 11 y de 14 a 17.

La medida de fuerza, de acuerdo a lo que indicaron desde la UTA, obedece a los incumplimientos de las empresas Ersa Urbano SA y Transporte Mariano Moreno SRL en el pago de las deudas salariales, fundamentalmente en lo que hace a la devolución de los días descontados por paro.

Hasta ahora las empresas sólo abonaron el 50% de los días de descontados; el restante 50% sería cancelado este martes 15, pero ante el incumplimiento los choferes decidieron volver a las retenciones de servicio.

La protesta se da en un clima de conflicto que se agudiza. Este martes se produjo el despido de un chofer, el que se manifestará este miércoles encadenándose a las instalaciones. «No sabemos si se va a encadenar en el depósito de Ersa de calle Gervasio Méndez o en Recursos Humanos, en la Mariano Moreno», contó un delegado de los choferes.

El servicio de colectivos vienen cumpliéndose con intermitencia desde julio último, un año después de que Buses Paraná -la agrupación que integran Ersa y Mariano Moreno- tomara las riendas de la concesión.

El más recordado es el largo conflicto suscitado en agosto pasado, cuando los colectivos no circularán durante 15 días.

Pero en realidad el conflicto viene sosteniéndose desde julio, con paros esporádicos todos los meses.

En julio, los choferes hicieron un paro que se extendió entre el jueves 11 al martes 16. La medida de fuerza de los choferes sólo se levantó después de que la Secretaría de Trabajo dictó una conciliación para analizar el pedido de apertura de proceso preventivo de crisis que formularon las empresas agrupadas en Buses Paraná.

La petición, finalmente, fue rechazada. Y derivó en una nueva huelga de choferes, la más extensa, de 15 días, durante el mes de agosto.

En septiembre el conflicto reapareció. Del viernes 6 al domingo 8.  El lunes 9 se retomó el servicio.

Octubre inició con quite de colaboración -ya no huelga- de los choferes de colectivos. Reclama la cancelación de la segunda cuota de $4.500, de una suma total de $13.500. Sólo percibieron, en concepto de la segunda cuota, $2.000; restan $2.500, que de momento las empresas de colectivos no abonan.

La retención de servicios se aplicó los días 2 y 3 de octubre, pero el viernes 4 se normalizó. La medida vuelve a aplicarse este miércoles 16.

 

 

 

De la Redacción de Entre Ríos Ahora.