El secretario general de la seccional Gualeguay de la Asociación Gremial del Magisterio de Entre Ríos (Agmer), Silvio Vernhet, recibió ayer tres malas nuevas: la renuncia de tres integrantes de la comisión directiva departamental.
La principal baja es la de la secretaria gremial, Mirta Monti. Aunque también se fue la secretaria de Nivel Inicial, Alejandra Esteves, y la secretaria de prensa, Silvia Pruis. Todas, militantes de la histórica Lista Celeste.
La Celeste conforma la alianza Integración que dirige el mayor sindicato de la provincia a nivel provincial, alineada con la Celeste Compromiso y la Paulo Freire. Esa coalición se impuso en las elecciones sindicales de 2011, y refrendaron el triunfo en noviembre de 2014, y hasta 2017.
En su carta de renuncia, la secretaria gremial de Agmer Gualeguay explica que, “luego de haberme tomado un tiempo para reacomodar ideas y pensamientos, pasada la conmoción producida por acciones que le competen a Ud. y otr@s compañer@s, y movilizada con la esperanza de advertir cambios positivos en la manera de desarrollar la conducción de nuestro sindicato, y viendo que esto no ha ocurrido y, lo que es peor, el descreimiento se ha profundizado, dejo expresado por escrito lo que Ud. ya sabe y conoce, pues se lo he dicho de frente como creo que deben decirse las cosas los compañeros de trabajo, lo cual hemos vivido en reiteradas ocasiones, y que hoy me movilizan a dejar registro de lo percibido en el colectivo docente”.
Y enumera los motivos de su ida, a saber:
“-un sindicato más cerca de la patronal que de sus bases;
-un sindicato que se maneja por amiguismos y no por capacidad, compromiso y militancia;
-un sindicato que carece de independencia política, pues la política del sindicato debería ser la de estar al lado de los compañeros de trabajo y no a favor de la patronal, como muchas veces lo ha demostrado;
-un sindicato sin capacidad de convocatoria autónoma, que sólo responde a lo que se le “sugiere” desde CDC;
-falta un sindicato a la vanguardia en la defensa y construcción de derechos colectivos y no de resoluciones hechas “a medida” para pagar favores;
-no se ve un sindicato que dispute y genere normativa, sino un reproductor y sostenedor de resoluciones del CGE que no sólo alteran el clima de lucha, sino que imponen una obediencia sospechosa al no hacer un rechazo organizado y sistemático, con carácter institucional, liderado por los que están en los cargos de conducción que es a quienes les corresponde;
-se advierte una representación, aunque legítima, cada vez más alejada de las necesidades estratégicas y políticas de los que sostenemos, política y económicamente, este sindicato;
-un sindicato que genera el rechazo unificado de los compañeros, a seguir pagando alquiler de vivienda a quienes como Ud., puede pagarse el suyo, pues no hay justificación alguna para seguir sosteniendo esta situación. Hay demasiados docentes que alquilan y esperan gustosos que Agmer les pague el alquiler como lo hace con Ud.;
-Duele un sindicato que subestima a sus compañeros y los ignora;
-Una comisión liderada por quienes son capaces de traicionar, no merece sostenerse en el tiempo…y los compañeros lo saben”.
Las renuncias se dan en una seccional relevante: es el territorio de origen del actual secretario general de Agmer provincial, Fabián Peccín.
Otra renuncia es la de Alejandra Viviana Esteves, quien en su dimisión explicó que se va por las “profundas diferencias de pensamientos e ideas sobre el manejo que ha tenido en temas que afectan al conjunto de los trabajadores de la educación”. Y da un paso al costado por cuanto, asevera en su carta, se sintió “defraudada” por cuanto “las opiniones diferentes” constituyen una “traición”.
De la Redacción de Entre Ríos Ahora.