“Juan L. Ortiz es un punto de encuentro donde confluyen la poesía, el paisaje y su pueblo”, sostuvo el gobernador Gustavo Bordet tras conocer la edición reciente de las obras completas del poeta gualeyo del autor de El Junco y la Corriente. Bordet recibió este martes a la secretaria de Cultura, Francisca D´Agostino, con quien analizó la creación del Consejo Provincial de Cultura, y el mandatario recibió además un ejemplar de la obra completa de Juan L. Ortiz editada recientemente.

La Universidad Nacional del Litoral (UNL) y la Universidad Nacional de Entre Ríos (UNER) son responsables de la edición crítica de la obra de Juan L. Ortiz, tan esperada como la que lanzó Ediciones UNL en 1996, y que después fue reimpresa en varias oportunidades. A casi 25 años, muchos críticos e investigadores siguieron trabajando, leyendo y pensando la obra del poeta entrerriano. A partir de esas indagaciones, remarcan los directores de Ediciones UNL y Eduner, Ivana Tosti y Gustavo Martínez respectivamente, se logró dar con textos inéditos y contar con la mirada de una nueva generación de lectores y colaboraciones internacionales, en un trabajo que continuó a cargo de Sergio Delgado.

Entre las novedades de la reedición, adelantaron que se organiza en dos tomos tematizados desde el diseño visual a partir del emblemático poema “Rosa y dorada”. El primero de ellos corresponde a los libros escritos entre 1924 y 1971, reunidos bajo el título “En el aura del sauce”, que la Editorial Biblioteca Constancio Vigil publicó en tres tomos, a comienzos de la década de 1970. Detrás de ellos se encontraba el proyecto poético de un Libro único que Ortiz escribió a lo largo de toda su vida, que se publica ahora en un solo volumen, por primera vez. En la sección “A la orilla del aura”, al final de ese volumen, se reúnen los poemas que hubieran pertenecido al hipotético cuarto tomo, algo que no pudo concretarse por la intervención de la Editorial Biblioteca, en los primeros años de la dictadura; y el fallecimiento del escritor, en 1978. En “Hojillas”, el segundo volumen de la reedición, se encuentran poemas que no formaban parte de “En el aura del sauce”, prosas, ensayos, traducciones y correspondencia; además de una cronología, una bibliografía, un dossier de ensayos y una importante sección de notas.

El trabajo entre las editoriales de la UNL y la UNER, que tiene como antecedente la colección “El país del sauce”, se dio de manera natural entre sus equipos de trabajo, y eso debió acompañarse “de una cierta arquitectura político institucional”, como indica Sergio Delgado. La experiencia constituye para él “un modelo de inteligencia política universitaria y sobre todo de sensibilidad cultural, que puso en primer plano la necesidad que existía de una nueva edición de la obra de Juan L”.

Esas investigaciones, que dieron lugar a distintas ediciones críticas -como las de Manauta y Villanueva, también dirigidas por Sergio Delgado para Eduner- fueron realizadas por equipos de las dos editoriales universitarias. En este punto, el editor recuerda particularmente las contribuciones de la docente Claudia Rosa –fallecida en 2018- que permitió dar con textos de Juan L. al recuperar el archivo de Mastronardi y a partir de sus trabajos sobre el escritor Alfredo Veiravé. “Gracias al conocimiento que se genera en ese tipo de investigaciones, repertoriando archivos, localizándolos, se van armando redes de contactos y así localizamos muchos textos de Ortiz”, señaló.

Bordet hizo referencia al valor que la obra de Juan L. Ortiz tiene para la literatura argentina y sostuvo que “haber acompañado este valioso trabajo desde el gobierno de Entre Ríos, y el de Santa Fe, parte de la convicción que expresaba el mismo Juan L.: `la poesía no es de nadie y es de todos´, y de la necesidad de `crear las condiciones para que todos la sientan´”.

En el mismo sentido, D´Agostino puso de relieve que se trata de “una edición histórica”, además de “muy importante y muy bella”.


De la Redacción de Entre Ríos Ahora