Menos de 10 kilómetros separan a Colón de San José. Ambas ciudades tienen un contacto corriente, y los vecinos de uno y otro distrito van y vienen, ora por cuestiones comerciales, ora por trabajo. Esa proximidad dejó a las dos ciudades en estas pandemia en una misma incómoda situación: en aislamiento estricto y con circulación del virus por conglomerado, a un paso de la circulación comunitaria, calificación que también alcanza al pequeño pueblo de Liebig, el caserío que nació alrededor de la gran planta frigorífica que supo ser de capitales ingleses, que tuvo hasta aeropuerto propio.

José Luis Walser, intendente de Colón, vecinalista, y Gustavo Bastian, jefe comunal de San José (PJ), han receptado en los últimos días el enojo de sus vecinos por el contagio voraz de coronavirus que derivó en que, después de más de 70 días en encierro, el aislamiento dejara atrás sus aperturas, y todo volviera a fojas cero. Este viernes, Walser y Bastian debieron dar explicaciones a los comerciantes que ya venían castigados por la cuarentena y ahora, como en el juego de la oca, debieron volver varios casilleros atrás y cerrar sus locales. La situación no es una mera parálisis de ventas: en Colón están alertando por el corte en la cadena de pagos, empresarios y gremios se unieron en un pedido de auxilio al gobernador Gustavo Bordet, y Walser ya anunció que no podrá pagar sueldos y aguinaldo a fin de mes: cayó la recaudación y cayó también la coparticipación.

Todo se disparó por el incumplimiento por parte de cuatro jóvenes, cuatro jugadores de rugbier, de las normas de aislamiento: mientras casi toda la ciudad de Colón permanecía encerrada, ellos siguieron con su vida social activa, yendo al gimnasio, manteniendo reuniones, encontrándose a comer, organizando salidas. La directora del Hospital San Benjamín, Norma Hernández, dijo que uno de las probables vías de contagio fue una mateada, revelación que avivó el apetito de los medios nacionales, que tuvieron a Colón en sus portadas.

De Colón el coronavirus saltó a San José, que junto con Pueblo Liebig están ahora en fase 1. Según el mapa que publicó este viernes el Grupo de Investigación de la Facultad Regional Concepción del Uruguay de la Universidad Tecnológica Nacional (UTN), mientras la Incidencia Acumulada de toda la provincia de Entre Ríos es de 4,62 por cada 100.000 habitantes, en el departamento Colón es del 27,3.

La presión social por el contagio imprudente de Colón movió al intendente Walser a dar intervención a la Justicia Federal, que abrió una causa que tramita la fiscal Fabiana Minatta con intervención del juez federal Pablo Seró. Está caratulada «Violación de medidas-Propagación de epidemia (artículo 205)», y el juez ya ordenó indagatorias. Pero la situación tuvo un giro grave el jueves cuando se viralizaron fotos de un grupo de personas aisladas en el Hospital San Benjamín que habían realizado una pequeña fiesta en las salas de internación.

La directora del hospital aclaró lo obvio, que ese ágape hospitalario «no fue autorizado», que el sistema de salud provee de alimentos a todas las personas internadas, por lo cual nadie debe pedir que le lleven comida y que «ante la publicación en redes sociales de una fotografía donde se evidencia una actitud de los individuos que no se corresponden con las reglas impartidas por el personal de salud durante la internación y que demuestra una conducta desaprensiva de las personas internadas, la cual ha producido además evidente malestar en una sociedad que hoy se encuentra angustiada a la luz de los prejuicios sociales y económicos que un nuevo aislamiento generan, la Dirección ha procedido a comunicarse con la Fiscalía Federal de Concepción del Uruguay».

Todos los implicados en la violación de la cuarentena, la mateada y los festejos en la sala de internación del Hospital San Benjamín serán indagados por el juez federal Pablo Seró, aunque ello ocurrirá recién cuando cumplan su período de aislamiento.

Pero además de esa causa en la Justicia Federal, el grupo de levantiscos de la cuarentena de Colón tienen una causa en la Justicia provincial, que tramita la fiscal Micaela Di Pretoro, de la Unidad Fiscal de Colón. El mismo jueves de las pizzas y el helado en la sala de internación, y de las selfies en las redes sociales, ocurrió una situación enojosa, denunciado en la Justicia por la directora del Hospital San Benjamín, Norna Hernández: a las 14,30 del jueves, «el paciente P.G., aislado bajo tratamiento por Covid-19, arrojó un celular contra un panel de vidrio en la sala general del Hospital, estando otros pacientes y personal que lo asistía».

Según contó el periodista Lucas Beber, todo habría sido producto de una comunicación telefónica con la madre y a consecuencia de una discusión y en un enojo, tiró el teléfono y rompió el vidrio.

Colón está ahora en la mira de las autoridades sanitarias, pero también todo el corredor de la ruta nacional 14, como quedó de manifiesto en la reunión de gabinete de este viernes. El director de Epidemiología, Diego Garcilazo, habló del cambio que ha habido en el mapa epidemiológico de la provincia y de que ese cambio «va a seguir impactando en nuestra provincia, principalmente por lo que tiene que ver con el corredor de la ruta 14 que está muy relacionado a lo que es el comercio y todas las acciones relacionadas a la ciudad de Buenos Aires donde hoy tenemos el eje fundamental de casos contagiados y donde muchos de nuestros entrerrianos se han contagiado viajando a estos lugares».

En ese sentido, manifestó que «el gobernador (Gustavo Bordet) dio pautas muy claras y muy concisas respecto a los lineamientos a seguir viendo este mapa epidemiológico que evaluamos en conjunto el COES (Comité de Emergencia Sanitaria) y todos los miembros del gabinete y dentro de esas pautas especificas y precisas es trabajar con los intendentes codo a codo con ellos para principalmente para tener en cuenta que es lo que se puede hacer, que no se puede hacer, en qué condiciones se puede hacer y la capacidad de control y la responsabilidad de control que tienen también los municipios en todas estas actividades que se van abriendo».

De la Redacción de Entre Ríos Ahora