El robo de 327 dosis de vacunas antigripales, hecho que se detectó el viernes 27 de marzo  en el Hospital Materno Infantil San Roque, de Paraná, no registra avances significativos en la Justicia.

El Ministerio Público Fiscal ha venido realizando distintas medidas, pero ninguna de significación que permita esclarecer el hecho que, de momento, está rodeado de un cerrado misterio. En Tribunales estiman que no habrá buenas nuevas en la causa hasta agosto próximo, cuando el trabajo en la Justicia se retome después de la feria de julio, que se extiende hasta el viernes 24 de este mes.

El hecho, el robo de 327 dosis de vacunas antigripales, se detectó el viernes 27 de marzo y fue puesto en conocimiento, primero, de la Comisaría 2°, y luego de se dio intervención al Ministerio Público Fiscal. La denuncia la formuló el director del Hospital San Roque, el bioquímico Víctor Brondi. Una semana después, el viernes 3 de abril, Brondi hizo una ampliación de la denuncia ante la Fiscalía. Lo hizo con el asesoramiento del responsable legal del Ministerio de Salud, Germán Coronel.

La sustracción de las dosis de vacuna se hizo de forma vandálica: se destruyó el candado que resguardaba el lugar, y además quienes lo hicieron tenían conocimiento de la seguridad del lugar por cuanto eludieron ser registrados por las cámaras de seguridad.

“La Dirección del Hospital Materno Infantil San Roque y su equipo informan a la comunidad que, efectivamente, luego de detectado el faltante de 327 dosis de vacuna antigripal, el viernes 27 de marzo pasado (al mediodía), se ha procedido a realizar, tanto la denuncia en la Justicia como la apertura del pertinente sumario administrativo interno”, indicó un comunicado oficial.

“Esta Dirección –agregó-, y el personal de la institución, se encuentran plenamente abocados a la emergencia sanitaria por la pandemia de Covid-19. Al momento que nueva información surja sobre el caso, se hará pública”.

De la Redacción de Entre Ríos Ahora