La toma de la estancia Nuestra Casa, en la zona de Santa Elena, que la firma Las Margaritas regentea, ha desatado una guerra total dentro de la familia del exministro de Agroindustria de la Nación durante el macrismo, Luis Miguel Etchevehere.
La piedra de toque, ahora, es la decisión que hizo pública el jueves 15 del actual la única hija mujer de la dinastía Etchevehere -que dirigió durante más de un siglo El Diario, de Paraná- : en alianza con el dirigente Juan Grabois y como parte de la presentación de la Fundación Artigas, Dolores Etchevehere decidió ceder el 40% de las tierras que posee en Entre Ríos a grupos de campesinos que responden a la organización Movimiento de Trabajadores Excluidos (MTE).
«He decidido ceder el 40% de mi herencia para construir un proyecto agroecológico sobre las tierras que me corresponden. Un cuarto de la sucesión de los Etchevehere. Esa porción es para reparar el daño que se hizo. El proyecto comienza hoy, 15 de octubre. Hoy plantamos la primera semilla en la tierra que soy propietaria por derecho natural, derecho que me permite utilizarlas desde ahora mismo», anunció la única hija mujer de Luis Félix Etchevehere.
El ingreso, primero, fue denunciado «con armas», aunque ahora los Etchevehere dicen que la toma se hizo con «picos y palas».
Dolores Etchevehere, única hija del matrimonio de Luis Félix Etchevehere, último director de El Diario, y Leonor Marcial, acusa a sus tres hermanos, Luis Miguel, Arturo Sebastián y Juan Diego, de la comisión de una serie de delios gravísimos, como evasión impositiva, vaciamiento de empresas y trabajo esclavo, y como parte de su estrategia por conseguir que le den participación accionaria en las empresas familiares, el jueves, junto a integrantes de Proyecto Artigas y el dirigente social Juan Grabois, tomó el campo Nuestra Casa, donde permanecen hasta hoy.
Los Etchevehere denunciaron la intromisión y durante el fin de semana han reclamado a la Justicia celeridad en el trámite de desalojo. El sábado, en una ampliación de la denuncia, sumaron el testimonio del coadministrador de la estancia, Mariano Rubiolo, quien sindicó a Dolores Etchevehere como parte de la toma de Nuestra Casa. Este lunes, Las Margaritas SA, propietaria de la estancia, divulgó un comunicado en el que echó tierra sobre Dolores.
Mientras, su familia sumó dardos contra Dolores, y ventiló sus trapitos al sol.
«Dolores Etchevehere vivió siempre de los recursos económicos de sus progenitores. Al poco tiempo del fallecimiento de su padre, en 2009, vendió a su madre todas sus acciones de SA Entre Ríos y Etchevehere Rural, percibiendo por ellas importantes recursos económicos», dice el texto del comunicado. Y agrega: «En agosto de 2010, ante Escribano Público, todos los herederos de Luis Félix Etchevehere realizaban la partición y adjudicación de acciones de Las Margaritas SA de acuerdo a la ley».
Así, su madre quedó con el 50%; en tanto, Dolores, Luis Miguel, Arturo Sebastián y Juan Diego, los cuatro hermanos, el 12,5% cada uno. «En agosto de 2018, Dolores Etchevehere vende a su madre y sus hermanos, ante Escribano Público y sus abogados, sus derechos hereditarios en la sucesión de su padre (12,5%) y sus acciones en Los Vascos Propiedades SA (12,5%)», dicen desde Las Margaritas SA.
Asimismo, también ante Escribano Público y sus abogados, Dolores Etchevehere «firma un convenio con su madre y hermanos en donde se acordó su escisión de la firma Las Margaritas SA, recibiendo nuevamente dinero y propiedades en contraprestación. Ese convenio fue presentado ante el Juzgado Civil y Comercial a cargo del juez Martín Furman, donde se tramita la sucesión Etchevehere.
«Con ello, en 2018, se concluyen de forma definitiva todas las causas judiciales y su desvinculación patrimonial total con su madre y hermanos. Mientras se ejecuta el convenio mencionado, a través de pagos económicos y en especie, Dolores Etchevehere informa a Las Margaritas SA, vía documento firmado ante Escribano Público, que vendió sus acciones (12,5%). Esta decisión fue tomada por ella ante la millonaria demanda que fue sujeta de sus propios abogados y entidades financieras», señalan.
En resumen, «Dolores Etchevehere no tiene ninguna vinculación económica ni patrimonial con su madre y hermanos desde hace más de 2 años. Hoy el Establecimiento Casa Nueva, propiedad de Las Margaritas SA donde Dolores Etchevehere no es socia, está usurpado por personas que violaron, usando violencia, el derecho a la propiedad privada».
De la Redacción de Entre Ríos Ahora