«Tenemos la necesidad y la decisión política de avanzar en la concreción de esta obra. Queremos que los vecinos se incorporen a esta metodología. No se trata de ganar o perder, sino de integrarse”, dijo hoy el intendente de Paraná, Adán Bahl, respecto de la obra de ensanche de bulevard Racedo y la polémica en torno a la extracción de árboles de la zona para poder concretar el proyecto.
El ensanche y repavimentación en una configuración de avenida con cantero central, dicen desde la Municipalidad, permitirá una fluidez en la circulación hacia las zonas Sur y este de la ciudad. Esto aliviará el actual congestionamiento de arterias cercanas que hoy se ven colapsadas por el alto nivel de circulación vehicular y el sentido de las calles, señalan.
La propuesta consiste en la construcción de dos calzadas de 8 metros de ancho, separadas por un cantero central de 1,50 metros, aprovechando el paquete estructural actual existente y promoviendo los ensanches necesarios para concretar el diseño previsto y la readecuación de los sentidos de circulación de las calles convergentes.

«Estamos absolutamente convencidos de haber llevado adelante un proceso con todos los requisitos cumplidos y con un marco de participación aún en contexto de pandemia», señaló Bahl al responder a las críticas por la obra en bulevard Racedo.
Y agregó: “La obra tiene antecedentes en estudios técnicos elaborados por el Consejo Federal de Inversiones -CFI- y el Banco Interamericano de Desarrollo -BID- para solucionar inconvenientes de conectividad vial que padece hoy la capital entrerriana”, indicó. “Se trata de estudios completos sobre la ciudad y la movilidad, de los que surgen propuestas prioritarias. Una de ellas es el ensanche de Racedo junto a calle Rondeau, que ya está en ejecución”, manifestó Bahl.
“Tomamos la decisión de llevar adelante el ensanche de esta arteria basados en estudios técnicos. Un informe que en su momento contrató la provincia a través del Consejo Federal de Inversiones –CFI-, en donde 8 expertos brindaron su opinión sobre qué arterias de nuestra ciudad era necesario ampliar para darle mayor dinamismo a la ciudad. Y un antecedente aún anterior es el informe del Banco Interamericano de Desarrollo –BID- que va en el mismo sentido: en la necesidad de ampliar determinadas arterias de nuestra ciudad para lograr mayor movilidad”, explicó.

De la reunión participaron la viceintendenta Andrea Zoff; el secretario de Obras Públicas, Maximiliano Argento; la secretaria de Coordinación Estratégica, Camila Farías; el secretario de Ambiente de la Provincia, Martín Barbieri; el secretario General de la UOCRA, Hugo Salazar; la directora de Comunidades Vecinales, Bibiana Fehr; los responsables de las Comisiones Vecinales Sáenz Peña, Luis Balbuena; Elpidio González, Ariel Breidot y Olegario V. Andrade, Olga Salas; Míriam Martínez (Facultad de Agronomía); Clelia Zapata (Mesa Arbolado – Asamblea) y los vecinos Jorge Martínez, Federico Blettler, Marta Castillo, Nicolás Meier, Jorgelina Jacobsen, Liliana Pichetto, Juan Villaoa, Elías Stang y Leandro Otasso.
«Esta obra no fue definida ni por mí, ni por la viceintendenta. Tiene todo un fundamento basado en la necesidad intervenir algunas avenidas en la ciudad de Paraná. El proyecto fue desarrollado por expertos profesionales, cuenta con financiamiento de Nación y es una obra que está incluida en el presupuesto municipal, tiene aprobación legal y legislativa por unanimidad de los concejales de Paraná y cuenta con los requisitos ambientales”, aseguró el Intendente.
“Venimos trabajando desde el primer día de la gestión elaborando proyectos para dar respuestas a las demandas de la ciudad. Cuando detectamos la posibilidad de financiamiento de esta obra, abordamos el proyecto, lo desarrollamos y lo primero que hicimos fue convocar a las vecinales para contarles de qué se trataba”, sostuvo el Intendente.
Refirió que Paraná fue el primer municipio del país en firmar el Convenio Nº 1 en el marco del programa Argentina Hace 2, que integra tres obras: ensanche de calle Racedo, ensanche de calle Rondeau y el puente en calle Gálvez.
“Una vez firmado ese convenio iniciamos un proceso licitatorio con un pliego totalmente auditado por Nación con todos los requisitos que exige la legislación vigente como son las técnicas de elaboración, estudios de impacto ambiental y las certificaciones pertinentes”.
Vinculado con el recambio de cañerías de agua, sistematización para captar los hídricos excedentes en días de lluvia, se realizó un análisis de todo el sistema de desagües pluviales y cloacales, las reparaciones y adecuaciones pertinentes, señalización y semaforización e intervención en las veredas lo que va a generar una arteria muy dinámica, revalorizando la zona. “Pero lo más importante es la seguridad que otorga a todos los ciudadanos que circulen por calle Racedo, con una mejora estética de todo el lugar, además de poder llegar rápidamente a avenida Ramírez”.
Árboles
En relación a la polémica por el arbolado, Bahl subrayó: “Estamos en una misma sintonía con una ciudad verde, como queremos todos los paranaenses”.
Dijo que el año pasado se plantaron 1.400 árboles en Paraná. “En calle Rondeau vamos a plantar 100 árboles nuevos y dentro de poco vamos a estar haciendo calle Larralde, con la ubicación de 100 más. Tenemos además una planificación para este año de plantar 4.000 árboles nuevos”.
Respecto de calle Racedo, indicó que la situación en debate se presenta con los árboles que se encuentran en la primera línea, porque se ubican en la trama de circulación. “Hay distintas soluciones. De más de 200 árboles existentes en todo el trayecto, un total de 87 deben retirarse porque están al borde del cordón. Por algo los antiguos habitantes de calle Racedo plantaron la segunda línea”, explicó Bahl y agregó que “esos árboles hay que extraerlos y proponemos como solución las técnicas ambientales que rigen en la sustitución: por cada árbol que se extrae se plantan tres especies y es precisamente lo que estuvimos planteando a los vecinos”. En este sentido, indicó que hubo aportes interesantes. “Se planteó que estas tres especies sean adultas, no sean finitas, que tengan un desarrollo de 10 años para que la compensación sea más rápida. Nosotros tomamos esa idea y la vamos a aplicar. Otra es trasladar el árbol más cerca de la línea de edificación. Lo que les quiero transmitir es que hemos llevado adelante un proceso ajustado a la ley vigente, con el respaldo de la normativa nuestra, con el desarrollo de la obra de profesionales, con un estudio de movilidad urbana que lo justifica y con una absoluta amplitud de mitigar estas extracciones que lamentablemente están en esta línea en donde va la trama, pero que tiene solución”.
De la Redacción de Entre Ríos Ahora