Si algo faltaba en el escándalo en torno a la situación del cura Juan Diego Escobar Gaviria fue un comunicado de una casa religiosa diciendo en forma pública que no lo quiere entre los suyos.
La Casa Padre Lamy, una casa de retiros espirituales, ubicada en Oro Verde, y que depende de la congregación Servidores de Jesús y de María, señaló, después de haberlo recibido durante tres días, que acoger a un sacerdote con una causa judicial por abuso de un nene de 11 años “no es compatible con la misión de la Casa Padre Lamy”.

Los religiosos señalaron que el miércoles 9 “fuimos sorprendidos por la noticia de una supuesta prisión domiciliaria del padre Juan Diego en la Casa Padre Lamy de Oro Verde.”
Al respecto, señalaron que “nunca fuimos consultados sobre la posibilidad de recibir el padre Juan Diego, bajo esta forma de acogida”. Y agregaron que Escobar Gaviria “nunca estuvo en Casa Padre Lamy desde su entrega a la policía de Nogoyá, del martes 1° de noviembre, a la noche”.
Por eso, han hecho saber al arzobispo de Paraná, Juan Alberto Puiggari que “rechazamos “la posibilidad que el Padre Juan Diego sea recibido en nuestra Casa”.
El jueves 3, el juez de Garantías de Nogoyá, Gustavo Acosta, había ordenado encarcelar con prisión preventiva a Escobar Gaviria en la Unidad Penal de Victoria. Pero los abogados defensores del sacerdote, Juan Pablo Temón y Milton Urrutia, apelaron esa medida.
El camarista Arturo Exequiel Dumón, del Tribunal de Juicios y Apelaciones de Gualeguaychú, hizo lugar al planteo y ordenó la libertad de Escobar Gaviria, pero con una serie de condiciones que generaron una comedia de enredos.
Dumón resolvió, textual, esto: I). Rechazar el agravio esgrimido por los defensores técnicos del imputado contra la resolución dictada por el juez de Garantías de Nogoyá por el cual rechazo el planteo de nulidad en la audiencia respectiva, con costas a la defensa apelante. II).- Hacer lugar parcialmente al recurso interpuesto, contra la resolución del juez de Garantías y Transición de Nogoyá por la que decreto la prisión preventiva del imputado, resolviendo la sustitución de dicha medida dispuesta, debiendo el imputado someterse a las siguientes reglas : a) al cuidado y vigilancia de la institución del arzobispo Juan Alberto Puiggari, quien deberá informar periódicamente – dos veces a la semana- que el imputado sigue bajo la medida dispuesta, b) obligación de presentarse dos veces a la semana ante la fiscalía actuante, c) la prohibición de salir sin autorización de la localidad de Oro verde, de la provincia de Entre Ríos y del país durante la vigencia de la misma. e) prohibición de mantener cualquier tipo de contacto o comunicación, con la supuesta víctima, sus familiares o allegados, ya sea a través de interpósita persona o a través de cualquier medio. Art. 349 inc. c. del C.P.P.E.R III) Disponer la inmediata libertad del imputado y la carga a sus defensores del traslado bajo su responsabilidad, hacia la Casa Padre Lamy en Oro Verde, comunicándose al Juzgado de Garantías lo obrado a los fines de que practique las comunicaciones pertinentes e imponiendo las costas en materia de agravios por su orden. No siendo para más se dio por terminado la audiencia, siendo las 15:11 horas, labrándose la presente, la que previa lectura y ratificación se firma por el Sr. Vocal, y los comparecientes. Se deja constancia que el presente acto ha sido registrado mediante soporte digital de audio y video, lo que se remitirá adjunto al legajo y se procederá a adelantar el contenido de la presente vía fax / mail.”.
Ahora, en Casa Lamy dicen que no lo quieren ni regalado. Aunque antes lo acogieron sin emitir palabra.

El 2 del actual, hubo un primer informe público de la Casa Lamy que señaló:
“- Domingo 30 de octubre: El sacerdote Juan Diego Escobar Gaviria pidió hacer un retiro de unos días, sin dar explicaciones.
– Lunes 31 de octubre: El padre Juan Diego informó el superior de la Casa, padre Samuel, de la razón de su presencia. Dijo que una famililla de su parroquia, de San Lucas Evangelista, de Lucas González, lo denuncio por un supuesto abuso sobre su hijo menor. El necesitaba alojarse en una casa de retiros, rezar y evitar el contacto con la gente, esperando que la justicia lo llame.
El arzobispo Juan Alberto Puiggari vino para encontrarlo e informarnos de su deseo de transparencia con la justicia.
Decidimos permitirle quedarse en Casa hasta que la justicia se manifieste.
– Martes 1° de noviembre: Nos enteramos a medio día, por Facebook, que el juez de Garantías de Nogoyá, Gustavo Acosta, libró a la mañana una orden de captura del cura Juan Diego Escobar Gaviria.
El arzobispo, vino para encontrar el padre Juan Diego y nos dijo que informo al juez y a la policía que el padre Juan Diego estaba alojado en nuestra Casa. Nos avisó que la policía lo iba a buscar a la tardecita.
A la tarde, el padre Juan Diego se fue para entregarse, por propia iniciativa, al juez de Garantías de Nogoyá.”
Ahora, Escobar Gaviria está en un departamento particular en Oro Verde, aunque ese parece no ser el destino definitivo para el sacerdote.

De la Redacción de Entre Ríos Ahora.