La escritora Claudia Piñeiro (coautora de la serie sensación en Netflix, El Reino, pero por sobre todo de una extensa producción literaria: Betibú, Elena sabe, Las grietas de Jara, Una suerte pequeña, Las viudas de los jueves) abrió este sábado la IX edición de la Feria del Libro «Paraná Lee».

En el predio de la Escuela del Centenario, «Paraná Lee» ofrecer este año el doble de stands que ocupan las amplias galerías y el patio techado de la escuela, con ingreso por calle Tucumán, donde bajos los árboles se armaron placenteros livings que reciben a los visitantes.

Piñeiro llegó temprano a «Paraná Lee», y recorrió los muchos puestos de libreros y editoriales, y se encontró con la entrerriana Selva Almada (Ladrilleros, El viento que arrasa, Chicas muertas) que este año participa de la feria con el stand de la librería que creó, Salvaje Federal, para dar a conocer la literatura del interior del país.

En un salón colmado, Piñeiro respondió preguntas de un panel conformado por el escritor Fabián Reato, Elena Salomón y Oscar Lesa, y recorrió su obra, contó sus personajes, los cómo y los porqué.  Además, dio algunas pistas de qué hacer a la hora de escribir.

Para ser escritor, dijo, antes se debió ser un buen lector. «Hay que leer. Punto», diagnóstico.

Su incursión en el mundo de la literatura surgió luego de desempeñarse como contadora en una empresa del rubro ferretería. Leyó en el diario Ámbito Financiero que la Editorial Tusquets, de España, había lanzado un concurso de novela, y decidió que tenía que participar. Se anotó. Pero cuando se anotó cayó en la cuenta de que se trataba de novela erótica, «La sonrisa vertical». Quedó entre los diez finalistas sobre 200 participantes.

Ese texto, claro, nunca se publicó, y dice que lo tiene guardado en algún lugar de su casa y que jamás lo releyó. «Esa novela está en algún cajón guardada. No porque sea erótica, sino porque nunca leo lo que escribo, y debe estar mal escrito, pienso. Quizá cuando me muera,  mis hijos quieran hacer plata y la publican», ironizó.

Lo suyo, sin embargo, no fue la novela erótica, sino la novela negra.

«No hay una receta para escribir una novela negra. Yo, como soy bastante racional, investigo, he hecho cursos de criminología, medicina forense, porque me gusta, aunque después que me inscribo no sé si lo voy a aplicar a la literatura», detalló.

Entonces, contó la anécdota con su electricista que la ayudó a desarrollar el nudo de La viuda de los jueves: cómo hacer para que tres personas que están en una pileta de natación se mueran electrocutadas. Eso le preguntó a su electricista, que primero dudó de la consulta y después le elaboró un completo informe de cómo debería ocurrir.

 

Después, la escritora manifestó su beneplácito por asistir a la Feria del Libro de Paraná. Además, por la novedad, después de dos años, que este tipo de convocatorias sean presenciales.

“Es una alegría porque las ferias siempre son encuentros entre escritores y lectores, y por la pandemia estos encuentros no se pudieron dar durante dos años. Ahora, nos podemos encontrar, y charlar, y abrazarnos y eso es una alegría”, dijo.

Luego, ponderó la realización de la edición 2021 de “Paraná Lee”. Dijo que le “han dado un lugar importante , que se merece. Los stands tienen ofertas de libros muy interesantes, así que los invito a recorrerlos”.


De la Redacción de Entre Ríos Ahora

. .