La Fundación Cauce, Cultura Ambiental – Causa Ecológica envió una nota al intendente de Paraná, Adán Bahl, en la que hizo observaciones al proyecto de sistematización, saneamiento e integración urbana del arroyo Las Viejas; cuestionó la “insuficiente” participación ciudadana y la desactualización del relevamiento sobre la cantidad de viviendas y habitantes del sector de influencia de la obra respecto al acceso al sistema cloacal, entre otros puntos.

En su análisis, la organización ambiental observó críticamente no sólo el proyecto sino también los procedimientos de acceso a la información y participación ciudadana que se vienen ejecutando y las políticas públicas que se implementan en relación con las cuencas hídricas que conforman el territorio de Paraná.

El proyecto que presentó la administración del intendente Adán Bahl abarca desde el nacimiento a la desembocadura en el río Paraná, a lo largo de 1.600 metros.

La obra tiene un plazo de ejecución de 15 meses, un presupuesto de $785 millones y es financiada por el Gobierno nacional, a través de la Secretaría de Recursos Hídricos que depende del Ministerio de Infraestructura de la Nación.

Bahl gestiona con Nación recursos para sanear el arroyo Las Viejas

 

La obra consiste en la  sistematización, saneamiento e integración urbana del arroyo Las Viejas

De acuerdo a los datos que presentó el gobierno de la ciudad, el proyecto consiste en el saneamiento del arroyo Las Viejas, entre su nacimiento en la confluencia de los arroyos Colorado y Culantrillo en zona de avenida Uranga y su desembocadura en el río Paraná, a lo largo de 1.600 metros.

El saneamiento consta de dos grandes intervenciones. Por un lado, la sistematización del arroyo para evacuar los excedentes pluviales provenientes de las 1.200 hectáreas de aporte que tiene la cuenca, cuya obra de conducción consiste en un canal trapecial a cielo abierto revestido en hormigón armado.

Por otro lado, y como una primera etapa del tratamiento de la calidad del agua que conduce el arroyo, se propone una intervención que incluye un sistema de rejas de desbaste para los residuos sólidos urbanos arrastrados en las crecidas, un sistema de sedimentación de sólidos y un filtro biológico para bajar los niveles de contaminación del agua previa a la descarga en el río. Esto permite una mejora del sector, pero también favorece al aprovechamiento de la playa del Thompson.

El saneamiento se complementa con extensión de la red cloacal faltante en la zona de influencia del proyecto, como así también la reparación de tramos de red cloacal existente que vuelvan eventualmente al arroyo.

Pero la Fundación Cauce puso sus reparos.

En la carta, que lleva la firma de la directora ejecutiva, Valeria Enderle, se indicó que fue insuficiente la participación ciudadana, tal como lo estipula el punto 9 del proyecto, referido al Estudio de Impacto Ambiental. “(…) el municipio invita a la ciudadanía a participar de un proceso de ‘Consulta información pública’ por un plazo de tres (3) días corridos o hábiles -no unifica criterio entre el programa y la invitación-. Este escaso y limitado plazo, para un proyecto de estas características y la importancia que el mismo reviste para la ciudad conforme a propios comentarios públicos de su persona, y de acuerdo a los distintos beneficios para la comunidad que se indican en el documento mencionado, hace que el procedimiento propuesto realmente no se considere como una instancia de consulta pública a la ciudadanía, sino el mero cumplimiento de una formalidad para poder dar continuidad al proyecto pretendido”.

 

Para Cauce se evidencia “espontaneidad” e “imprudencia” en la publicación de algunos de los documentos referidos a los aspectos ambientales del proyecto y a la hora de convocar a una “instancia de consulta pública”, la que calificó de «repentina y fugaz referida a una temática de importancia para la ciudad conforme a la magnitud del proyecto».

 

En cuanto al estudio de impacto ambiental, Cauce dijo que si bien se identifica, en la página 4 del proyecto, que dicho arroyo, acarrea residuos sólidos provenientes tanto de la cuenca alta, como también de las tareas de recolección y clasificación informal que se realiza en sus márgenes y la presencia de grandes cantidades de residuos sólidos que acarrea el curso de agua y teniendo en cuenta que los arroyos Colorado y Culantrillo recorren varios kilómetros de la ciudad a cielo abierto, y arrastran en el cauce gran cantidad de residuos sólidos, “¿no sería conveniente colocar una reja de desbaste más, en la confluencia de estos dos arroyos o incluso aguas arriba de cada arroyo?”, preguntó Cauce.

 

Cauce Nota Bahl by Entre Ríos Ahora

 

 

De la Redacción de Entre Ríos Ahora