El caso del niño que este lunes llegó sin vida a la Guardia del Hospital Centenario, de Gualeguaychú, hecho por el cual la Justicia ordenó la detención de su madre y de su padrastro, tuvo este martes un nuevo eslabón trágico: el suicidio del hombre detenido en la Jefatura de Policía.

El fatal desenlace ocurrió este mediodía en la celda donde se encontraba detenido aguardando brindar declaración indagatoria por el presunto crimen de su hijastro de dos años en un contexto de violencia familiar.

Fuentes judiciales confirmaron  que durante el mediodía de este martes, el padrastro del menor de dos años que habría sido asesinado en un contexto de violencia familiar, se quitó la vida en la celda donde se encontraba detenido y disposición de la Fiscalía.

Muerte violenta de un niño: revelan estremecedores detalles

Alfredo Sebastián «Pato» Ferreyra, de 38 años de edad, fue encontrado sin vida en el calabozo en el que se estaba alojado, a la espera de ser convocado para brindar declaración indagatoria en el marco de la causa que investiga el presunto crimen de Tahiel Mossou.

 

Desde Fiscalía aclararon que «fue visto en buenas condiciones alrededor de las 11.30 horas, cuando le acercaron el almuerzo a la celda donde estaba alojado». Ferreyra aún no había brindado declaración indagatoria, «ya que aguardábamos los resultados preliminares de la autopsia de la presunta víctima», explicaron.

«Ferreyra trabajaba en una cooperativa de construcción que depende de la institución en la que se recuperaba de sus adicciones», confirman fuentes de la investigación. Fue detenido este lunes poco antes del mediodía y trasladado a la Jefatura Departamental de Policía. Tenía cuatro hijos menores de edad bajo su custodia, con los cuales convivía junto a la madre de Tahiel y otros tres menores en una vivienda de Rosario y Manzzoni.

 

 

 

 

Fuente: R2820Radio