«Confío en que la gente no quiere volver atrás. La mayoría de la gente de Colón no quiere eso, independientemente de lo mal o bien que nos vaya en la gestión. Está demostrado que la gente quiere dirigentes honrados, y que se manejen como un vecino más. Eso está a las claras».
Mauro Godein, presidente del bloque de concejales Todos por Colón, dice que la denuncia por violencia de género que presentó un abogado contra el intendente vecinalista José Luis Walser es parte de una estrategia que liga con la «vieja política», aunque prefiere no ponerle nombres propios. Pero asegura que el ataque que soportó el intendente en su vivienda particular, la denuncia ahora de una trabajadora despedida y el traslado de un miembro del clero que denunció la utilización de la droga para comprar votos forman parte de un mismo modus operandi.
Y que eso, dice Godein, ya ocurrió, con otros modos, por otros canales, durante la campaña de 2019, cuando el peronismo perdió Colón y el vecinalismo se alzó con el triunfo en las últimas elecciones. «Ya se vivió en la elección pasada. Cuando se generó este movimiento inédito, que si bien en lo político lideró el vecinalismo pero que tiene a dirigentes de otros partidos, incluso gente de distintas religiones, de movimientos sociales, fue un quiebre. Fue una situación en la que la ciudad dijo basta y fue dejar atrás un modelo político agotado», asegura el jefe del bloque oficialista en el Concejo Deliberante de Colón.
«Si bien Colón es una ciudad con mucho renombre por su perfil turístico, tiene 30 años de atraso en infraestructura», plantea. Godein asegura que el vecinalismo llegó al para cambiar esa situación, pero que en el camino sufrió ataques de distintos sectores. «Cuando se generó este movimiento, empezamos a sufrir ataques sistemáticos, sobre todo José Luis (Walser): perfiles truchos en Facebook, noticias falsas, aprietes, intentos de amedrentamiento. Pero al final terminó todo en una elección que ganamos en la primera, y en la segunda vuelta. Pero fue tanto el uso del aparato municipal en ese momento, que se llegó a favorecer a un candidato», señala.
En esa línea, relaciona la salida de la ciudad del párroco de la parroquia Santos Justo y Pastor después de su denuncia por la entrega de drogas por el voto. «Te quedas sin palabras al pensar que en esto esté involucrado el gobierno. Te quedas sin palabras. Ahí decís: ´Estamos a la deriva´. Por eso mi confianza de que estos jóvenes –se refiere a la gestión Walser- que se animaron a meterse en política, con experiencia, con valores y con un compromiso social. No solamente se plantearon ganar el poder para tener el poder, sino que quieren cambiar la ciudad. Ahora estamos en una lucha desigual. Estos –por quienes manejan el negocio de la droga- tienen estrategia, mucho dinero, gente capacitada, y nosotros parece que llegamos tarde. Llegar a pensar que el mismo gobierno esté en esto es muy duro, porque te sentís desprotegido», dijo el cura por esos días y generó el enojo del entonces intendente y hoy diputado Mariano Rebord (PJ).
El jefe del bloque de concejales de Todos por Colón asegura que aquella declaración del sacerdote y su posterior traslado de la ciudad no fue azarosa. «Néstor Toler era una persona muy querida en la ciudad, la de mayor consenso social que había en la ciudad. Realizó una denuncia: dijo que el cura se cambiaban votos por drogas. Ahora, lo que yo estoy contando no es antojadizo. Estaba a la vista de todo el mundo. Le costó que al cura lo denuncien en plena pandemia y le valió un traslado. Ahora, se empieza a generar un clima similiar, ante un nueva elección. Es la vieja estructura que vuelve a aparecer, que se resiste a este cambio», analiza.
Godein recuerda el ataque que sufrió en su vivienda el intendente Walser, y señala que «no queremos darle importancia, detenernos en esto. Pero lamentablemente ahora ocurre lo mismo: una denuncia traída de los pelos. No tengo duda de que esto no existió tal como lo denuncia este abogado. Vemos que son los mismos protagonistas detrás de la denunciante. Siempre abogados de dudosa reputación, siempre los mismos actores. Sabemos que cuando se aproxima una instancia electoral, algo de esto pasa».
«Independientemente de cómo le vaya en la gestión al intendente, como persona es intachable. Me parece que esto es parte del cambio generacional en la dirigencia política. Hay una dirigencia que está quedando atrás, y se resiste. No se quiere retirar -señala Godein-. Pero los va a retirar la gente con el voto. Hay muchos que se resisten a dejar su lugar. Pero la ciudadanía no vuelve para atrás».
De la Redacción de Entre Ríos Ahora