El área Legal de la Municipalidad de Paraná comenzó a escuchar la misma letanía en Tribunales: las denuncias que se han efectuado por daños a bienes de la ciudad -pegatinas en los nuevos contenedores, en las garitas, en las columnas de la Peatonal San Martín- no prosperarían porque los fiscales que toman los casos no encuentran denuncias.
Citan para eso el artículo 138 del Código Penal, que reprime con prisión de quince días a un año al que “destruyere, inutilizare, hiciere desaparecer o de cualquier modo dañare una cosa mueble o inmueble o un animal, total o parcialmente ajeno, siempre que el hecho no constituya otro delito más severamente penado”. Esa acción tiene que inutilizar el bien, cuestión que, según la mirada del Ministerio Público Fiscal no ocurre.
Una fuente oficial de la Municipalidad de Paraná contó a Entre Ríos Ahora contó que, a pesar de la postura de la Fiscalía, las denuncias van a continuar. Las presentaciones judiciales no sólo alcanzan a las pegatinas sino a daños más severos, con la destrucción total de contenedores. En la actual gestión del intendente Adán Bahl ya se han inutilizado 31 contenedores, la mayoría por incendios intencionales.
La denuncia que más repercusión produjo hacia el interior de Tribunales -donde ahora se observa una grieta respecto de qué posición se adopta ante la destitución de la Procuradora Adjunta Cecilia Goyeneche- fue la que se concretó el 10 de este mes. Ese día ocurrió un hecho insólito: una manifestación al término de una audiencia judicial en la que se debatió un sobreseimiento en el marco de una causa por supuesto pago de coimas que se sigue al exgobernador Sergio Urribarri.
Al salón de audiencias ingresó un puñado de mujeres que reprobó el trabajo de los abogados defensores y protagonizó una batahola, que siguió con escraches a los letrados, y que incluyó -todavía sus autores se desconocen- la pegatina de afiches a favor de la fiscal destituida y en contra del exgobernador Urribarri.
Ese día, la administración Bahl formalizó en la Justicia una “denuncia penal por el delito de daños contra bienes del Estado Municipal”. Aquel viernes 10, además, “se constató que dichos objetos se encontraban en gran número con ostensibles pegatinas – las cuales se ilustran con fotografía que acompaño a la presente –. Los mobiliarios vandalizados se encuentran distribuidos en distintos puntos del centro cívico de la ciudad”.
Pero a pesar del afán de los funcionarios del Municipio por poner en manos de la Justicia la investigación de quién o quiénes son autores de los daños, en Fiscalía las denuncias no tendrían demasiado futuro.
De la Redacción de Entre Ríos Ahora