Un pedazo de lata blanca, letras rojas, y esta frase: “No pasar”.
El cartel, de lata, en letras rojas, está puesto en el acceso al complejo de piletas del camping Toma Vieja.
Ninguna de las cuatro piletas han sido habilitadas, y están, claro, sin bañistas. Sólo está el grupo de guardavidas, que toman mate a un costado, y esperan lo que de momento no ocurrirá: la llegada de gente a ocupar las piletas.
El complejo Toma Vieja está deshabitado este sábado a la mañana. Aunque el calor es mucho y fuerte, no hay bañistas porque las piletas no se pueden usar. Un empleado cuenta que una de las cuatro piletas tiene el motor roto, la otra tiene problemas con el filtro, y la obra en general de refuncionalización del complejo se hizo a medias y está atada con alambres.

La exintendenta Blanca Osuna inauguró el complejo de piletas de la Toma Vieja a comienzos de diciembre de 2015, sin que la obra de refuncionalización estuviera concluida. Todavía no la está. Todo está más o menos en veremos, los trabajos sin concluir, y el “portal de acceso”, hecho trizas.
Un costo de $700 mil para algo que no existe antes de que se inaugure.
“Hoy es un día de fiesta”, dijo Blanca cuando inauguró las piletas., que entonces se llamó Parque Recreativo Acuático
“Hemos trabajado mucho para ampliar el espacio histórico del Parque Toma Vieja. Trabajamos con la barranca que se encontraba abandonada y destruida hace años. La recuperamos y hemos construido miradores. Además con la empresa Enersa hemos conveniado para incorporar una zona de bosque natural y paseo, que suma unas 20 hectáreas en total. Mediando una ley la 10288, la provincia expropió el histórico mirador que está casi en el ingreso y que se añade a esta belleza. Existe una segunda etapa que ya está adjudicada, aun en obra —aclaró— y que otorga más contexto a este Parque. Siento que hemos podido hacer muchas cosas y que el orgullo mayor es poder mostrar que el turismo ha crecido y se afirma y tiene en este lugar una referencia importante”, dijo Blanca.
Cuando los trabajos se licitaron, en 2014, se presentó un único oferente, Galvani Constructora, con una oferta de 11.173.090,46 pesos.
Esta primera parte del plan refiere a la refuncionalización del núcleo de piletas existentes, su mejora integral, aprovechando desniveles como recursos de diversión y diseño, más la construcción de dos nuevas piletas aprovechando los antiguos piletones de decantación (de 40 mts. x 40 mts. cada uno).
Todo parecía funcionar bien. Sólo que el cámping Toma Vieja, ya empezado el verano, volvió a quedarse sin piletas.

De la Redacción de Entre Ríos Ahora.