En medio de las muestras de repudio de todo el arco político del país ante el ataque que sufriera este jueves por la noche, en la puerta de su domicilio, en el barrio de Recoleta, en Buenos Aires, la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner, aparecen mensajes que ponen en duda ese gravísimo hecho.

En Entre Ríos, un concejal del PRO puso en dudas que el ataque a la vicepresidenta haya ocurrido, aún cuando las cámaras mostraron a un hombre gatillar a centímetros de la cabeza de CFK mientras saludaba a la gente que se había acercado a las cercanías de su vivienda. Se trata de un edil de María Grande.

«Todo armado», escribió en Twitter Luciano Arce, así, sin ningún agregado. Lo puso en medio de las muestras de repudio que inundaron las redces sociales tras el ataque a Cristina.

 


No fue un mensaje sin sentido ni fuera de contexto. Antes había dado un «me gusta» a un mensaje de la diputada santafesina Amalia Granata, otra de las dirigentes que puso en dudas lo ocurrido anoche con CFK. «Las pruebas del fiscal son tan contundentes que la desesperación es evidente», escribió Granata tras el ataque.

También compartió en su cuenta de Twitter el mensaje de la dirigente del PRO Patricia Bullrich, que dijo: «El presidente está jugando con fuego: en vez de investigar seriamente un hecho de gravedad, acusa a la oposición y a la prensa, y decreta un feriado para movilizar militantes. Convierte un acto de violencia individual en una jugada política. Lamentable».

Según supo Entre Ríos Ahora, Arce representa al PRO en el bloque de Juntos por el Cambio local y se presenta como un frigerista. Hay quienes señalan que no se le conoce mucha historia militante y que, de hecho, su reconocimiento público es externo a la política: en la faz privada atiende un kiosco.

De la Redacción de Entre Ríos Ahora.