La Justicia morigeró hoy las medidas de restricción de la libertad que pesan sobre César Roberto Cepeda, denunciado en 2020 por los padres de dos niñas, de 4 y 6 años -sus sobrinas- de haberlas abusado mientras las menores quedaban a su cuidado. En una decisión que adoptó el camarista Mauricio Derudi, integrante del Tribunal de Juicios y Apelaciones de Gualeguaychú, se dispuso que Cepeda cumpla con arresto domiciliario, sin tobillera electrónica en una modalidad tal que se le permitirá concurrir a su trabajo en la delegación de Enersa, aunque no acercarse a las víctimas ni a sus familias. Los hechos denunciados ocurrieron en Lucas González; la prisión domiciliaria la cumplirá en Crucesitas Tercera.
La decisión del magistrado incluye la prohibición de contacto con las víctimas y con los testigos admitidos a juicio y dejó a criterio del Juez de Garantías de Nogoyá la implementantacion de cualquier otra medida de coerción, que no sea privativa de la libertad, y que el magistrado entienda que colabore a cautelar el proceso.
El martes 13 del actual, el juez de Garantías de Nogoyá, Gustavo Acosta, firmó la resolución de remisión a juicio oral de la causa por abusos a menores que involucra Cepeda. Los hechos, según denunciaron en 2020 los papás de dos niñas, de 4 y 6 años, sucedieron en la vivienda de Cepeda, en Lucas González -a 135 kilómetros de Paraná, en el departamento Nogoyá-: allí las niñas permanecían al cuidado de sus tíos mientras la mamá -separada del padre- cumplía con su horario laboral. Esa decisión de Aocsta, remitir la causa a juicio, fue ratificada por Derudi.
Cepeda es la pareja de la hermana de la mamá de las dos niñas. Según la imputación fiscal en la apertura de la causa, se lo acusó de que, «durante el transcurso del período de aislamiento obligatorio decretado a nivel nacional (cuarentena), aprovechando la circunstancia de que la denunciante dejaba a sus hijas menores de edad (G y C, de tres y seis años respectivamente) al cuidado tanto de su hermana SS como del encartado Cepeda, en el domicilio que éstos habitan en calle Eduardo Mongeloz (…)de la ciudad de Lucas González, en el horario de 13 a 16 hs. o 20 a 22 hs., dependiendo la demanda laboral de la madre de las menores, como así también en otros horarios donde la menor se quedaba en la casa de ellos en virtud de la relación de parentesco que los une, el incurso, valiéndose de la relación de confianza y rol que tenía respecto de la menor de tres años GN, en reiteradas oportunidades le dio besos en la boca y tocó por debajo de la ropa”.
Los fiscales Maite Burruchaga y Rodrigo Molina, de la Unidad Fiscal de Nogoyá, y el querellante particular, Mariano Navarro, pidieron 19 años de cárcel para Cepeda. Pero además, Navarro pidió que, hasta que se realice el juicio, se le aplique prisión preventiva en una unidad carcelaria ante los riesgos procesales de entorpecimiento de la investigación y eventual peligro de fuga. El juez Acosta receptó el pedido de una medida cautelar sobre Cepeda, pero no accedió a la prisión preventiva, pero sí al arresto domiciliario con tobillera electrónica. El trámite de la tobillera no parece menor: el Servicio Penitenciario de Entre Ríos comunicó a la Justicia que ese proceso tardará unos 45 días. Es decir: tardarían 45 días en conseguir la tobillera.
El subalcalde Carlos Salomón, jefe del Departamento Seguridad Informática y Monitoreo Electrónico del Servicio Penitenciario, informó al Juzgado de Garantías de Nogoyá que “debido a la cantidad de dispositivos y a las instalaciones pendientes en la actualidad no se cuenta con disponibles para instalaciones referidas al detenido Cepeda César Roberto. Siendo el tiempo de espera de aproximadamente 45 días”.
El defensor de Cepeda, Walter Martínez, apeló las medidas cautelares aplicadas por el juez Acosta. También pidió la exclusión de la querella, que el caso se dirimina en un juicio por jurados y que se le aplique arresto domiciliario sin restricciones para trabajar. El juez Derudi sólo hizo lugar a la domiciliaria sin tobillera, pero rechazó los otros planteos, según dijo el querellante Mariano Navarro.
La investigación
Desde que se presentó la primera denuncia, el viernes 3 de julio de 2020, Cepeda ha estado con libertad restringida. Una semana después de la primera presentación judicial, se sumó otra denuncia: una mujer contó en los Tribunales de Nogoyá que Cepeda había conocido a su hija, una adolescente entonces de 14 años, en la Fiesta del Lino, de Lucas González, y a partir de entonces había comenzado a preguntar por ella. El hombre la siguió un día camino a la escuela de la menor. Dijo que «el tipo este iba manejando una camioneta roja y paró al lado de ella y de nuevo le preguntó si iba a la escuela y la miró otra vez como quien dice de ´arriba a abajo´».
El 28 de agosto de 2020, se sumó la segunda denuncia de Alejandro Negri, el papá de las dos niñas, de 4 y 6 años.
Desde que la causa se abrió, Cepeda no pudo volver más a su casa, en Lucas Gónzalez: reside en un establecimiento rural de Crucesitas Tercera. Cada vez que debe salir del departamento Nogoyá o de la Provincia, debe pedir autorización judicial. Aunque esa medida se había morigerado, ahora volvió a tener vigencia.
Desde que se enteró que el tío de sus hijas había abusado de las niñas, Alejandro Negri inició una campaña para concientizar sobre el abuso sexual en niños y adolescentes. Después de lo que les ocurrió a sus niñas, organió una maratón, que une General Ramírez con Lucas González. Antes, puso por toda la ciudad de Lucas González carteles y pasacalles con esta consigna: «Los niños no mienten. No al abuso sexual infantil».
«Tiene que pagar lo que hizo. Yo sé que va a ser condenado. Y que va a estar en la cárcel mucho tiempo», ha dicho Alejandro Negri.
El 16 de julio último, durante los multitudinarios festejos patronales en Nogoyá, en honor a Nuestra Señora del Carmen, Cepeda se paseó como un jinete más en la manifestación popular más convoccante de la ciudad. «Es una falta de respeto», dice Negri cuando descubrió en la cuenta oficial de la Municipalidad de Nogoyá en Facebook la foto de Cepeda en el desfile por el festejo patronal que, a la vez, es la celebración de 240 años de la fundación de la ciudad. Cepeda tiene una relación de parentesco con el intendente local, Rafael Cavagna (Juntos por el Cambio).
Mientras, el papá de las dos nenas abusadas se concentra en seguir concientizando. El 19 de noviembre próximo se realizará la segunda maratón contra el abuso sexual infantil. «Los niños no mienten», es el lema.
Cepeda, en tanto, aguardará la fecha de realización del juicio oral en su contra, con la expectativa de un pedido de condena altísimo: 19 años de cárcel.
De la Redacción de Entre Ríos Ahora