«Acá se termina la impunidad», dijo hoy Dolores Etchevehere, frente al edificio de Tribunales, en Paraná, donde encabezó un acto junto a Proyecto Artigas y extrabajadores de El Diario para denunciar los «pactos de silencio» que, aseguró, han permitido que sus hermanos, Luis Miguel, Arturo Sebastián y Juan Diego Etchevehere, y su madre, Leonor María Magdalena Barbero Marcial, hayan podido rehuir de responder ante la Justicia frente a la denuncia por estafa que presentó en 2011.
Denunció como «mafiosos» a los «Etchevehere corruptos», en clara referencia a su familia. Pero fue más profundo todavía. «Nunca dejé de investigar. Pero la causa durmió años y años en algún cajón de estos Tribunales -aseguró-. Cuando avanzaba, cuando descubría evidencia, los pactos de poder se activaban para que triunfe la impunidad. Me amenazaron, me persiguieron, hicieron todo lo que estaba a su alcance para doblegarme y frenar la denuncia. Pero no lo lograron».
La presencia de Dolores Etchevehere este mediodía frente a Tribunales coincidió con la declaración indagatoria de su hermano, el exministro de Agroindustria de Mauricio Macri, Luis Miguel Etchevehere, en la causa por estafa que tramita el juez de Transición Carlos Ríos. Antes de ese trámite que se cumplió hoy, hubo cinco pedidos de indagatoria por parte del Ministerio Público Fiscal que no prosperaron. El primero, en diciembre de 2016; el último, el 9 de marzo último.
La investigación judicial busca establecer si se cometieron delitos en una serie de movimientos empresariales y pedidos de dos préstamos de una línea subsidiada por el Gobierno, en teoría para fines productivos, pero que los Etchevehere usaron en provecho propio. Y además, está la línea de «vaciamiento» de El Diario, en cuyo manejo los Etchevehere tuvieron, hasta 2010, la mayoría accionaria. Después, el poder estuvo en dos empresarios santafesinos con los que la familia negoció: Walter Grenón, dueño de Red Mutual, y Ramiro Nieto, ligado a Fútbol para Todos.
En la explanada del edificio de Tribunales, Dolores habló y dijo: «Quiero decirles que estoy muy emocionada por esta jornada histórica. Histórica porque por primera vez los Etchevehere corruptos tienen que dar explicaciones en la Justicia -aseguró-. De apoco, todos lo que sufrimos el accionar mafioso de los Ethevehere corruptos nos encontramos en una misma lucha por verdad, justicia reparación». Y agregó: «El camino que emprendemos con Proyecto Artigas es un primer paso para echar luz sobre los pactos de poder que existen en Entre Ríos y que garantizan la impunidad de esta banda de delincuentes».
Se dirigió entonces a los trabajadores despedidos de El Diario -80, en 2018- y aseveró: «Yo siempre quise mucho a El Diario, aunque mi familia de origen nunca me dejó participar. Soy periodista igual que mucho de ustedes. En 2012, cuando advertí que había algo raro, empecé a investigar. Reuní pruebas, mails, documentos, falsificaciones que demostraban la maniobra ilegal que los Etchevehere corruptos ejecutaban con ayuda de Grenón. En 2013 presenté la denuncia. Nunca dejé de investigar. Pero la causa durmió años y años en algún cajón de estos Tribunales. Cuando avanzaba, cuando descubría evidencia, los pactos de poder se activaban para que triunfe la impunidad».
Recordó después que en 2015 se presentó en la Procuraduría de Criminalidad Económica y Lavado de Activos (Procelac) pero a pesar de haber conseguido dictamen favorable, «la causa siguió durmiendo en este edificio».
«No tengo dudas de que sufrieron lo mismo que yo, amenazas, persecución, maltrato y la impunidad», expresó al centrar su mirada en los extrabajadores de El Diario. «Pero tampoco pudieron doblegarlos. Continuaron firmes. Luchando por sus puestos de trabajo y también por El Diario. A El Diario no lo construyen sus dueños, sino ustedes, los periodistas, los gráficos, los trabajadores y las trabajadoras», apuntó.
Y afirmó después. «Estoy convenida de que el surgimiento del Proyeto Artigas fue un punto de inflexión en nuestra lucha. Echamos luz sobre una mafia que operaba en la oscuridad. Pero ya no. Estas indagatorias que comienzan hoy son la prueba de que si luchamos unidos, los pactos de poder que tan arraigados están en Entre Ríos pueden romperse».
«A los jueces y fiscales de Entre Ríos, a quienes también están en Casa de Gobierno, a los políticos, les decimos que dejen de ser serviles al poder. No se dobleguen ante la presión. Tengan las agallas de hacer historia, y terminar con esta mafia corrupta que tanto daño le hace a la sociedad entrerriana y argentina -planteó-. Ahora, esta causa no es solo una cuestión provincial o local. Esta causa es nacional. La Justicia Federal está investigando. Y ya no pueden garantizar la impunidad de estos delincuentes. Los expedientes que duermen en este edificio contienen muchísimas pruebas. Los responsables de la inacción judicial deberían sentir vergüenza por su accionar a lo largo de los años».
Instó a la «unión» de todos los sectores que se han sentido afectados por los Etchevehere. «Este nuevo camino recién empieza. No vamos a parar hasta lograr verdad, justicia y reparación. Los pactos de poder pueden romperse. Acá se termina la impunidad».
Antes, la periodista Luz Alcain, extrabajadora de El Diario, habló de lo que significó el «vaciamiento» de El Diario y la pérdida de un medio de comunicación importante en la Provincia. «El vaciamiento lo vivimos desde la propia Redacción. Vimos el pacto entre distintos sectores de empresas y políticos», afirmó.
En tanto, Oscar Riani, extrabajador gráfico, habló de los despidos. «No se dan una idea lo que es saberse despedidos. Ha sido muy duro. Hemos vivido momentos muy duros».
De la Redacción de Entre Ríos Ahora