La reunión en la que se definirá de qué modo seguirá el aislamiento en Paraná entre el intendente Adán Bahl y el Comité de Organización de la Emergencia Sanitaria (COES) no será este sábado: se pospuso para el próximo lunes. Entonces no sólo estará en ese encuentro para definir eventuales medidas de contención ante el aumento de casos en la capital provincial sino que también será de la partida el gobernador Gustavo Bordet.
Este viernes la ministra de Salud, Sonia Velázquez, habló con preocupación de la situación epidemiológica de Paraná, donde se superaron los 120 casos positivos de Covid-19, y ya concentra un tercio del total provincial. «La situación de Paraná no ha bajado como hubiésemos querido. El comportamiento de los casos tiene varios componentes. Paraná tiene alta densidad de población y la circulación de personas se hace más compleja», dijo la ministra.
Velázquez comparó los resultados de Ibicuy y Colón, que tuvieron circulación por conglomerado, desarrollaron una estrategia activa de control con intervención de Salud y de los municipios, y lograron controlar los brotes, y lo diferenció de Paraná, donde ese paso no se ha podido dar. Al respecto, dijo, en declaraciones a Canal 11, que «en otras localidades se endurecieron más la medidas y Paraná deberá hacerlo para restringir la circulación de personas. El distanciamiento físico es una de las medidas principales. Tenemos que recuperar el statu quo sanitario, porque nuestros efectores de salud son las instituciones de referencia provincial».
«Si bien se han ido tomando medidas, necesitamos reforzar un contrato social entre las medias cívicas y el cumplimiento de protocolos de los comerciantes. Pese a que sabemos que la actividad económica está muy comprometida y ha tenido un cimbronazo en cuanto a los ingresos, tenemos que seguir cuidando estatus sanitario», señaló.
Tras una apertura paulatina de la cuarentena y en función del brote que se registró en Paraná a mediados de junio, desde el sábado 20 se volvió atrás con las actividades habilitadas. La decisión del intendente Adán Bahl de dar marcha atrás con distintas flexibilizaciones sobre la cuarentena estuvieron impulsadas por una alarma que se encendió hace algunos días en el Ministerio de Salud y que tuvo su momento crítico el sábado 20 de junio, cuando se reportaron 9 casos positivos en Paraná, que llevó de 11 a 20 el total de positivos en el departamento.
Fue así que a través del decreto N° 904 se dispuso “la suspensión en el territorio de la ciudad de Paraná y a partir de las 18” del 20 de junio y hasta las 8 del lunes 29 de las actividades recreativas y salidas de esparcimiento; actividades físicas y deportivas, incluyendo las individuales y sin contacto físico, náuticas y cualquier otra desarrollada en el río.
Siete días después, el sábado 27 de junio, con 87 casos positivos, la administración del intendente Bahl decidió aplazar hasta el 6 de julio la decisión de mantener las restricciones.
Bahl dijo que por recomendación de los expertos “se decidió prorrogar hasta el próximo lunes 6 de julio el decreto que sancionamos el sábado pasado y que busca disminuir la circulación de personas en Paraná y contener el brote” y acotó: “Es decir que continúan suspendidas las actividades recreativas y las salidas de esparcimiento; las actividades físicas y deportivas, incluyendo las individuales y sin contacto físico, náuticas y cualquier otra desarrollada en el río; las actividades gastronómicas – exceptuada la modalidad de envío a domicilio y tomar para llevar-; y la actividad en la Terminal de Ómnibus”.
Este lunes se sabrá, entonces, qué ocurre con el aislamiento en Paraná, en medio de fuertes presiones de distintos sectores, como hoteleros y gastronómicos, que reclaman la reapertura.
De la Redacción de Entre Ríos Ahora