Y finalmente la Feria del Libro funcionó. De la nada, los libreros, las editoriales, los escritores, todos juntos hicieron lo que parecía que no sería. La Feria del Libro abrió sus puertas el miércoles y tuvo actividad, intensa, ajetreada, hasta el domingo. Sin el Estado municipal siendo parte –se adujo veda electoral– se pudo probar que la autogestión funciona, y que permite desarrollar actividades culturales. Como la Feria del Libro. Y ya se piensa reeditar en 2018 una experiencia semejante, para evitar fiascos. Una nueva Feria del Libro impulsada por los libreros. Joaquín Díaz, de Vaporeso, y Lucas Mercado, de Providencia Libros, ensayan una hipótesis, y lo creen posible. Lo que ocurrió en 2017 es cabal muestra de que es posible. Sólo habrá que sentarse y planificar.

 

 

De la Redacción de Entre Ríos Ahora.