La Asociación Trabajadores del Estado (ATE) realiza este lunes una manifestación en la sede central del Consejo Provincial del Niño, el Adolescente y la Familia (Copnaf), en Corrientes y Uruguay, para denunciar la situación de «precarización laboral» de un grupo de empleados que se desempeñan en una residencia para mamás adolescentes que administra una ONG pero a la cual financia el organismo estatal.

Según ATE, se trata de «un grupo de compañeras del Copnaf que están trabajando en condiciones precarias en una residencia que aloja adolescentes madres». Se trata de la residencia El Sol, que funciona en calle Belgrano, a cargo de la ONG Sumando Voluntades. Se trata de una «residencia socio educativa que sostiene a mamás adolescentes y a sus hijos, con derechos vulnerados», según la página de Facebook de la entidad.

«Con la apoyatura de la Asociación Italiana Il Sassolino Bianco, que subvencionó este emprendimiento, abre sus puertas el día 23 de septiembre de 2005, bajo el control y con convenio del Copnaf, organismo contralor de las instituciones que trabajan con menores; para iniciar el cumplimiento de los objetivos planteados; teniendo como principal el de brindar contención a madres adolescentes embarazadas y/o con hijos, en situación de riesgo psicosocial , a través del Centro de Día y de la Residencia Socio Educativa El Sol, siendo destinatarias directas jóvenes menores de edad embarazadas y / o con hijos, cuya situación vital socio- familiar reviste carácter de riesgo», explica sobre sus objetivos.

Nélida Fabre, delegada de ATE, resumió así la situación: «Es un desastre la precarización y el manejo».

Desde ATE difundieron el posteo de una de las trabajadoras de la residencia, Ana Cancino, que relató la situación por la que atraviesan los 10 promotores de derechos que se desempeñan en la residencia El Sol.

«Somos 10 promotoras de derechos que trabajamos en una residencia de mamás adolescentes de modalidad mixta del Copnaf (con mixta nos referimos a mitad es de la ong Sumando Voluntades y mitad Copnaf), trabajamos en negro, con horarios rotativos y cobramos una módica suma de 25 mil pesos, la cual estamos a 26 de marzo y la última vez que cobramos fue fines de enero», señaló.

Gabriel Leconte, presidente del Copnaf.

En el ínterin, se han presentado ante el Copnaf y ante los responsables de Sumando Voluntades, «y se tiran la pelota una a la otra sin darnos algún tipo de explicación coherente y todas las semanas es el mismo verso de ´la semana que viene pagan´. Nuestro sueldo es una miseria y tenemos que estar mendigando que nos paguen algo que ya trabajamos además de sufrir las consecuencias de los malos manejos entre el Copnaf y la ONG».

Al respecto, agregó que desde hace tiempo han pedido una audiencia con el presidente del Copnaf, Gabriel Leconte, «y jamás nos recibieron. La ONG básicamente nos soltó la mano pero nosotras seguimos yendo cueste lo que cueste, porque nos gusta nuestro trabajo, porque jamás faltamos, siempre cumplimos nuestro deber tanto con residentes como con la institución El Sol».

«Ya no sabemos que hacer solo hacerlo público, ojalá llegue a quien tenga que llegar y pueda solucionar algo de todo esto porque hay 10 familias atrás esperando un plato de comida. Solo pedimos lo justo, lo que corresponde, que se hagan valer nuestro esfuerzo dentro de la institución», planteó la trabajadora.

De la Redacción de Entre Ríos Ahora